Tras casi una década buscando el remplazo de los aviones de combate Kfir, la Fuerza Aérea Colombiana, FAC, contará con un nuevo caza, así lo manifestó el presidente de Colombia, Gustavo Petro, en declaraciones realizadas el 17 de diciembre en la ceremonia de ascenso de oficiales generales y de insignia de las diferentes Fuerzas Armadas.
En su intervención afirmó que este remplazo es completamente necesario y que “las esposas de los pilotos agradecerán esta adquisición”, pues es un peligro volar en los actuales aviones de combate de la FAC, señaló, además fue enfático al referirse a la actual situación económica que se vive a nivel mundial, aclarando que esta adquisición no afectara las finanzas públicas, pues se cuenta con periodos de gracia.
El interés de Petro por el remplazo del Kfir nació después haberlo volado el 1 de octubre de este año, inmediatamente se empezaron a escuchar posiciones positivas de funcionarios del gobierno ante esta compra, finalizando con las declaraciones del presidente colombiano que aseguró que esta adquisición es billonaria si se mide en pesos colombianos pero estratégica si se mide desde los fines constitucionales y que ya se han hecho unas negociaciones con criterios contractuales en los cuales la inversión realizada se retomará mediante compensaciones económicas.
Una década en busca del remplazo del Kfir en la Fuerza Aérea de Colombia
En 2012, estudios realizados por la FAC, aconsejaron no adquirir un nuevo avión, pero sí hacerse con más células con horas de vuelo remanente y llevar toda la flota al nivel C-10, con capacidad de lanzamiento de misiles BVR, radar Elta EL/M 2032, sistemas de contramedidas electrónicas y casco DASH principalmente, además de una panoplia de armas donde se destacaban los misiles Derby, Pytnon V y la bomba guiada Spice 1000, algo que en su momento tuvo el rechazo incluso de oficiales activos de la Fuerza Aérea Colombiana.
Tras la finalización en 2017 del proyecto Coloseum, como fue denominada la modernización de los Kfir, se daba inicio al remplazo definitivo de este caza, existiendo una short list con tres aviones a evaluar: el F-16 Block 70 de la estadounidense Lockheed Martin, el Gripen E/F de la sueca SAAB y el Typhoon del consorcio europeo Eurofighter (formado por Airbus, Leonardo y BAE Systems).
Durante el gobierno de Iván Duque el fuerte candidato y elegido fue el F-16 Block 70, pero la pandemia y el continuo rechazo de partidos políticos de oposición hicieron imposible que se sellara esta adquisición.
Con los recursos aprobados para la adquisición mediante documentos CONPES y CONFIS dejados por el saliente gobierno y tras la llegada al poder de Gustavo Petro el pasado 7 de agosto, empezó a sonar un fuerte candidato: el avión francés Rafale de la empresa Dassault Aviation entró en la puja con una fuerte propuesta realizada por el propio presidente francés Emmanuel Macron en reuniones con su homólogo colombiano en dos oportunidades. La primera en Egipto. durante la reunión de la ONU sobre el cambio climático y la segunda en la reunión de la OCDE en París. El caza francés está así muy bien posicionado hoy para el remplazo de los obsoletos Kfir. (Carlos Vanegas - corresponsal Grupo Edefa en Colombia)
