El navío de desembarco de la Flota de la Federación rusa de la clase Ropucha o proyecto 775 Yamal (156) ha sufrido importantes daños debido a una colisión producida el 30 de diciembre en el Egeo. Los destrozos en la banda de babor (izquierda) se habrían producido tras chocar con el portacontenedores ORCA 2, que lleva bandera de Sierra Leona.
A este accidente se debería añade el hundimiento de otro buque militar ruso por colisión en abril de 2017, un hecho que apenas transcendió, pero del que sí informó la prensa turca, que señaló que la Guardia Costera de Turquía rescató a la totalidad de la dotación formada por 78 marinos. Frente a la profusión dada, incluso en los medios generalistas, de las colisiones sufrida por los navíos de la flota de los Estados Unidos acaecidos en el Pacifico entre 2016 y 2017, de los que defensa.com informó, la postura rusa es más hermética ante este tipo de siniestros.
El LST Yamal es participante habitual en el marco de la intervención rusa en Siria, como atestiguan las veces que ha sido fotografiado, por los atentos aficionados de la ciudad turca de Estambul, cuando cruza el estrecho de Bósforo.
El Yamal es el doceavo y ultimo navío del proyecto 775, que luego pasó a ser 775M, variante evolucionada de la que se construyeron otros tres navíos de desembarco. Estamos ante lo que en occidente se denominan navíos LST (Landing Ship Tank), que desplazan 2.200 toneladas, aunque a plena carga alcanzan las 4.080. Curiosamente estos navíos de la Flota de Rusia se construyeron en los astilleros polacos de Gdansk, dado que su construcción y entregas comenzaron a mediados de los años setenta cuando Polonia era fiel aliado de la extinta Unión Soviética, en el marco del también desaparecido Pacto de Varsovia. (Julio Maíz Sanz)
Fotografías:
·Daños en el puente del LST “Yamal”. Foto: Artem Balabins
·El “Yamal”, que luce en el casco el número 156, muestra los daños en la zona de más abajo el puente. Foto: Artem Balabins.
