Estados Unidos tiene previsto reactivar la 2ª Flota (2nd Fleet) de su Marina de Guerra (U.S. Navy) dada la creciente presencia de buques rusos en el Atlántico y la mayor competencia entre fuerzas militares a lo largo del mundo.
La 2ª Flota era una de las seis flotas en que organizó su capacidad naval Estados Unidos tras la Segunda Guerra Mundial. Su área de responsabilidad abarcaba el Océano Atlántico desde el Polo Norte hasta el Polo Sur y desde la costa Este de Estados Unidos hasta la costa Oeste de Europa.
El pasado 4 de mayo se hacía formal el interés de la U.S. Navy por reactivar la 2ª Flota, según el memorando elaborado por el Secretario de la Marina Richard V. Spencer. Este documento aprueba el restablecimiento del mando en Norfolf, Virginia, según las recomendaciones del Comandante de la Flota, almirante Phil Davidson y el Jefe de Operaciones Navales (Chief of Naval Operations o CNO) almirante John Richardson. Este último, en una intervención reciente afirmaba que “nuestra estrategia de defensa nacional deja claro que estamos de nuevo en una era de gran competencia de poder a medida que el entorno de seguridad continúa haciéndose más complejo y desafiante”. El actual responsable de las fuerzas navales en Europa, almirante James Foggo III afirmaba en 2016 que Rusia y Estados Unidos habían entrado en “la cuarta batalla del Atlántico” al hablar de la creciente presencia de submarinos rusos en el Atlántico, desafiando la presencia estadounidense en la región.
El restablecimiento de la 2ª Flota pretende ofrecer la mejor respuesta posible al cambiante entorno de seguridad. Para ello la puesta en marcha de su cuartel general, que estará situado en Norfolk y que será puesto en marcha el próximo 1 de julio.
Norfolk además ha sido ofrecido por el Pentágono como sede para el cuartel de la OTAN para Mando del Atlántico (NATO Joint Force Command for the Atlantic) de tal manera que se podría así asegurar la conducción de las operaciones de la OTAN en la región del Atlántico, reforzando la capacidad de disuasión y defensa y permitiendo proyectar estabilidad más allá de las fronteras. (José Mª Navarro García)
Fotografía: El portaviones estadounidense USS Entreprise (CVN 65) durante una navegación en el Atlántico en 2012 (US Navy)
