La sede de la Unidad Especial de Intervención (UEI), en Valdemoro (Madrid), ha acogido esta semana la presentación del vehículo táctico blindado de alta capacidad IBERO, diseñado específicamente para responder a las necesidades de esta unidad de élite de la Guardia Civil. El acto contó con la presencia del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, acompañado por la directora general de la Guardia Civil, Mercedes González.
Se trata de un vehículo táctico medio blindado, con capacidad para diez agentes, provisto de rampa de asalto y blindaje de nivel STANAG-2, que permitirá desempeñar las misiones con mayor eficacia y seguridad y mejorará las condiciones operativas para las futuras intervenciones de la unidad. La española TSD (Technology and Security Developments), con sede en Herencia (Ciudad Real), ha suministrado este vehículo táctico multipropósito adaptado a los requerimientos de la Guardia Civil.
El vehículo es parte de la familia de vehículos blindados multipropósito IBERO, presentada por TSD en 2020, y ha sido adaptado específicamente a las necesidades de la UEI. Es un producto nacional, fabricado íntegramente por TSD en Ciudad Real . El importe del contrato para su desarrollo asciende a casi 853.000 euros.
Un blindado multipropósito
En FEINDEF 2025 se mostró la versión del vehículo táctico IBERO, que, en colaboración con Sener, cuenta con una configuración clave que incorpora capacidades avanzadas de inteligencia y vigilancia. Una solución integral diseñada para el control de fronteras que incorpora antena de intercepción de comunicaciones y un dron cautivo, que integrado en el IBERO, proporciona una vigilancia aérea persistente, ideal para escenarios donde se requiere una supervisión continua sin comprometer la autonomía de vuelo.
En IDEX 2025 pudimos ver una maqueta del vehículo en configuración de caja abierta o pick-up, con un lanzador múltiple para sistemas merodeadores o loiterings Q-SLAM-40 de la también española Arquimea Space, Science and Defence. Se trata de una combinación de movilidad y potencia de fuego en la línea de las lecciones aprendidas de los conflictos recientes, donde este tipo de aeronaves no tripuladas con capacidad de ataque se han generalizado.
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UEI de la Guardia Civil, una unidad de élite
La Unidad Especial de Intervención (UEI) es una unidad de élite de la Guardia Civil concebida para cumplir operaciones especiales que requieran una especial cualificación debido a su peligrosidad, riesgo o dificultad: toma de rehenes o secuestro, detención de miembros de organizaciones terroristas o de bandas de crimen organizado y, en general, detenciones de carácter peligroso, como es el caso de atrincherados armados u otros caracterizados por la necesidad de tácticas y técnicas especiales, incluyendo el abordaje de naves en el mar.
La unidad depende directamente del director adjunto operativo de la Guardia Civil y está mandada por un teniente coronel. Se estructura orgánicamente en grupos de Intervención, que incluyen personal de asalto o intervención, junto con perfiles específicos, como tiradores de precisión, buceadores, técnicos en microvoladuras o patrones de embarcaciones. Por otro lado, cuenta con grupos de apoyo formados por guardias civiles con conocimientos técnicos en diversas materias.
A lo largo de su historia operativa, la UEI ha realizado más de 500 operaciones, ha liberado a 568 rehenes y ha detenido a más de 850 personas, incluyendo 145 comandos terroristas, la mayoría de la banda terrorista ETA.
Entre otras misiones, la UEI liberó al funcionario de prisiones José Antonio Ortega Lara, en junio de 1997, y ha resuelto cinco secuestros aéreos. También destaca la detención de un individuo atrincherado que había matado a una persona y secuestrado a un rehén en Santovenia de Pisuerga (Valladolid). En la operación fue herido fatalmente el teniente coronel Pedro Alfonso Casado, jefe de la unidad, que falleció posteriormente. En su honor, la base actual de la UEI se denomina “Acuartelamiento Coronel Pedro Alfonso Casado”.
Los orígenes de la Unidad Especial de Intervención (UEI) se remontan al 3 de junio de 1978, cuando se conformó el Grupo Especial de Intervención (GEI) a partir de la experiencia de una unidad de élite antiterrorista francesa conocida como Grupo de Intervención de la Gendarmería Nacional (GIGN). En los años 80 aumentó su plantilla y pasó a conocerse con la designación de Unidad Especial de Intervención. Desde 1996 tiene su sede en el complejo del Colegio de Guardias Jóvenes, situado en Valdemoro (Madrid).





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