La Fuerza Aérea de la República de Corea (ROKAF) tiene en marcha un programa para adquirir hasta cuatro aeronaves para misiones de Inteligencia, Vigilancia, Reconocimiento y Designación de Objetivos (ISTAR por sus siglas en inglés). Estos aviones tendrían por misión principal monitorizar las actividades de su vecino del norte aunque podrían también ser empleadas en otras misiones incluyendo apoyo a gestión de emergencias.
Se espera se elija el candidato a finales del año próximo, siendo la empresa estadounidense Northrop Grumman la última en anunciar un movimiento tras firmar un memorando de entendimiento con las compañías surcoreanas LIG Nex1 y Huneed.
El programa recibe la denominación Aeronave conjunta para Control y Vigilancia de Objetivos en Movimiento (Joint Moving Target Surveillance and Control Aircraft o JMTSCA), habiendo ofrecido Northrop Grumman una versión de su sistema Joint Surveillance Target Attack Radar System (JSTARS) adaptado a los requerimientos coreano como JSTARS-K. Estaría montado en un avión ejecutivo Gulfstream G550.
Northrop Grumman actuaría como integrador principal del sistema junto a las compañías surcoreanas citadas que asegurarían la compatibilidad del equipo con el resto de sistemas en servicio. Otro de las propuestas procede de la también estadounidense Raytheon que se ha aliado con la empresa surcoreana Korean Air para montar los equipos de mando y control y vigilancia sobre otro reactor de negocios, en este caso un Bombardier Global G6500.
Un sistema de este tipo está diseñado para monitorizar objetos en movimiento en tierra, identificar objetivos y enviar información de blancos a otros puestos de mando así como generar información de inteligencia para formar una imagen táctica de la situación en tierra, una suerte de avión de alerta aérea embarcada pero monitorizando la actividad en la superficie en lugar de en el aire. (José Mª Navarro García)
Fotografía: La propuesta de JSTARS-K para Corea del Sur (Northrop Grumman)
