Dos turistas franco-marroquíes fueron asesinados por los guardacostas argelinos en la zona marítima fronteriza entre Argelia y Marruecos, exacerbando las tensiones entre ambos países.
El incidente fue desencadenado por la entrada accidental de los turistas en aguas argelinas mientras estaban a bordo de motos acuáticas, las víctimas fueron identificadas como Bilal Kissi y Abdelali Mechouer.
Según la información disponible de los medios de comunicación marroquíes, los dos turistas estaban de excursión en el mar cerca de las costas marroquíes, en una región cercana a la ciudad marroquí de Saïdia, adyacente a la frontera argelina, cuando se perdieron y descubrieron que estaban en aguas argelinas. Se enfrentaron a un barco de los guardacostas argelinos que abrió fuego sobre ellos sin previo aviso, lo que resultó en la muerte de Bilal Kissi y Abdelali Mechouer.
Un tercer turista, Ismaïl Snabé, también de nacionalidad marroquí y francesa, fue detenido. El hermano de una de las víctimas, Mohammed Kissi, logró escapar y describió en detalle lo que sucedió, señalando que habían sido abatidos sin piedad.
El portavoz del gobierno marroquí no proporcionó explicación ni declaración con respecto al incidente. Indicó que este asunto está dentro de la competencia de la autoridad judicial y será tratado por las instancias judiciales competentes.
Esta tragedia ocurre en el contexto de crecientes tensiones entre Argelia y Marruecos, lo que agrava las diferencias entre los dos países debido a las disputas sobre el Sáhara Occidental. Cabe destacar que las fronteras entre ambos países están cerradas desde 1994 y las relaciones diplomáticas están rotas desde 2021.
Aunque no es la primera vez que los guardias fronterizos argelinos disparan a ciudadanos marroquíes cerca de las fronteras, el incidente genera preocupaciones particulares. A menudo se categoriza a cualquier persona que cruce la frontera desde Marruecos como un traficante de drogas, lo que lleva a considerar que los incidentes resultantes de un cruce accidental de las fronteras terrestres o marítimas entre los dos países pueden ser potencialmente mortales. (Alex Ribeiro)