El Ejército del Aire y del Espacio refuerza de forma significativa su capacidad de transporte táctico aéreo con la adquisición de 18 aviones Airbus C295, que sustituirán progresivamente a los veteranos CN235 y C212 en misiones de enseñanza, transporte y lanzamiento de paracaidistas del Ejército del Aire y del Espacio. La operación busca homogeneizar la flota y maximizar la comunalidad logística y operativa con los C295 ya en servicio, consolidando a España como uno de los principales usuarios mundiales del modelo.
Un programa para unificar flotas
El objetivo central del programa es armonizar los medios de transporte medio y ligero, reduciendo el número de plataformas distintas y simplificando mantenimiento, entrenamiento y cadenas de suministro. Con estos 18 aviones adicionales, el Ejército del Aire y del Espacio pasará a operar una flota total de 46 C295 en configuraciones de transporte, patrulla y vigilancia marítima.
Según Airbus, esta apuesta refuerza la autonomía y la soberanía estratégica nacional al apoyarse en un aparato diseñado y ensamblado en España, con un impacto directo sobre el tejido industrial y la cadena de subcontratistas del sector aeronáutico. A escala global, el C295 se mantiene como líder del segmento, con cientos de unidades vendidas a decenas de países y centenares de miles de horas de vuelo acumuladas.
El contrato tendrá un valor estimado de 1.560 millones de euros y vigencia desde su formalización hasta el 30 de noviembre del 2032, sin posibilidad de prórroga según analizábamos recientemente. Se enmarca en el Programa Especial de Modernización (PEM) “Tecnologías de Enseñanza en Movilidad Aérea Propulsión Eficiente (ITS-T)” para el que Airbus Defence and Space recibió un préstamo de concesión directa de 525 millones de euros en el marco de la financiación aprobada por el Gobierno.
Capacidades del C295 para enseñanza y operaciones
En su configuración de transporte, el C295 puede transportar hasta 70 soldados o 50 paracaidistas, operar desde pistas no preparadas, lanzar cargas y paracaidistas, y evacuar heridos, lo que lo convierte en una plataforma especialmente adecuada para la formación y el adiestramiento avanzado. Estas prestaciones permitirán reproducir con mayor realismo los perfiles de misión que después se ejecutan en operaciones, tanto en territorio nacional como en despliegues en el exterior.
El primer grupo de aparatos se destinará a la Escuela Militar de Transporte Aéreo, en la base de Matacán (Salamanca), donde sustituirán a los CN235 en tareas de enseñanza y transporte de pasajeros, paracaidistas y carga. Las entregas de este primer lote están previstas entre 2026 y 2028, asegurando una transición gradual sin mermar la disponibilidad operativa.
Relevo para la Escuela de Paracaidismo
El segundo grupo de C295 asumirá las misiones de lanzamiento de paracaidistas, tanto manual como automático, así como de lanzamiento de cargas, actualmente realizadas con C212 en la Escuela Militar de Paracaidismo de Alcantarilla (Murcia). Estas aeronaves tienen su calendario de entrega fijado entre 2030 y 2032, de modo que el relevo de los C212 se completará a comienzos de la próxima década.
Este escalonamiento permite mantener la continuidad de la formación mientras se incorporan nuevas tecnologías de cabina, aviónica y gestión de misión, familiarizando progresivamente a instructores y alumnos con un estándar común de plataforma. A medio plazo, la coexistencia de los distintos lotes de C295 facilitará la estandarización de procedimientos de lanzamiento y de seguridad en todas las unidades implicadas.
El contrato incluye un paquete integrado de entrenamiento en tierra diseñado específicamente para las necesidades de las escuelas de Matacán y Alcantarilla, con el fin de maximizar la eficiencia de las horas de vuelo de instrucción. Este sistema abarca simuladores de vuelo, soluciones de enseñanza asistida por ordenador y un software de gestión del entrenamiento que permitirá planificar, seguir y evaluar la progresión de los alumnos.
Asimismo, el acuerdo contempla un soporte integral para la flota C295 de la Escuela Militar de Transporte hasta diciembre de 2032, que abarca el mantenimiento de las aeronaves, la gestión de repuestos y materiales, y la operación del propio centro de formación. Este enfoque de ciclo de vida aporta previsibilidad presupuestaria y garantiza altos niveles de disponibilidad, un factor clave en la planificación anual de cursos y certificaciones.
Impacto industrial y proyección internacional
El C295 se ensambla en las instalaciones de Airbus Defence and Space en Sevilla, lo que asegura un retorno directo en términos de empleo cualificado e inversión tecnológica en España. La continuidad de la línea de producción y de los contratos de soporte fortalece la posición de la industria nacional en el mercado global de aviones de transporte táctico.
Con una base instalada de centenares de aparatos y usuarios repartidos en cuatro continentes, el modelo se ha consolidado como referencia mundial en su categoría, lo que facilita sinergias en modernizaciones futuras, interoperabilidad y programas conjuntos de apoyo logístico. Para el Ejército del Aire y del Espacio, la ampliación de la flota no solo incrementa capacidades, sino que ancla a España en el núcleo de países que marcan la evolución tecnológica del segmento. (José Mª Navarro García)






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