En fechas recientes nos hacíamos eco de la llegada el pasado 25 de marzo del submarino nuclear estadounidense USS “John Warner” a la colonia británica de Gibraltar donde iba a realizar “una escala de reavituallamiento” según comunicó el propio Gobierno de Gibraltar.
Durante la que iba a ser una visita de corta duración destinada al aprovisionamiento del submarino, podría haber sido sometido a reparaciones en la colonia, que abandonó en la tarde del pasado jueves, 5 de abril. La ubicación de las instalaciones de Gibraltar resultarían idóneas para este tipo de obras que se han repetido otras veces, como ya sucedió en 2000 con el HMS Tireles o el HMS Ambush en julio de 2016, tras protagonizar un accidente en el Estrecho de Gibraltar, en ambos casos buques de la Royal Navy.
Entre el reavituallamiento del submarino se encontrarían también sistemas de armas cuyo almacenamiento se comparte entre la Royal Navy y la Marina Estadounidense en Gibraltar, caso de misiles antibuque Harpoon, de crucero Tomahawk o torpedos Mk-48. Se trata de la primera visita de un submarino nuclear estadounidense desde que en abril de 2016 pasara por la colonia británica el SSGN Florida cuya presencia en la bahía provocó otro encontronazo entre embarcaciones policiales gibraltareñas y de la Guardia Civil.
El USS “John Warner”
El USS “John Warner” (SSN-785) es un submarino de ataque nuclear de la clase Virginia, una serie de sumergibles concebidos tras los muy sofisticados y tremendamente caros Seawolf de los que solo se construyeron tres unidades y que están dando reemplazo a los veteranos clase Los Ángeles. Este en concreto participó recientemente en un despliegue en el Mediterráneo, incluyendo su participación en el ejercicio “Dynamic Manta 2018”. (José Mª Navarro García)
Fotografía: El USS John Carter en Gibraltar. Se aprecian los andamios (Verdemar-Ecologistas)
