La Policía Federal brasileña, en cooperación internacional con la policía boliviana, participó este lunes en la destrucción de un laboratorio destinado al refinamiento de cocaína dentro del Parque Noel Kempff, en un área ubicada a unos 1,8 km de la frontera con Brasil.
Cuatro personas fueron detenidas en el acto: un colombiano, dos bolivianos y un brasileño, que fue trasladado junto con los demás a la ciudad de Santa Cruz de La Sierra. La acción también contó con la participación del Grupo Especial de Fronteras (Gefron) y del Centro Integrado de Operaciones Aéreas del Estado de Mato Grosso (Ciopaer).
Se trata de una de las mayores estructuras utilizadas para la refinación de cocaína jamás desmantelada en la región, en un minucioso trabajo desarrollado a través de la cooperación entre las fuerzas policiales de Brasil y Bolivia. Se estima que el laboratorio tendría capacidad para refinar aproximadamente 2 toneladas por semana, totalizando casi 10 toneladas por mes.
La policía boliviana encontró en el lugar mucho material para refinar, incluidos insumos de la misma naturaleza que los incautados en julio de 2021 por la Policía Civil en Comodoro/Mato Grosso, además de equipos como una destiladora y un potente generador, enterrados bajo tierra. y grandes cantidades de cocaína que serán pesadas en Santa Cruz de La Sierra.
En el laboratorio aún quedaba un sofisticado sistema de internet satelital, radio comunicadores, depósito de combustible, varias redes, en una especie de dormitorio, televisión, heladera, estufa y cafetería. Junto al sitio había dos pistas de aterrizaje, una de las cuales parecía haber sido inaugurada recientemente.
La refinería tenía dos accesos, uno por el río Guaporé y otro por el arroyo Espeto. La Policía Federal investigaba la presencia de la refinería en la región desde hacía unos dos años. El intercambio de información entre las fuerzas policiales de los dos países fue fundamental para la acción de esta semana.
La hipótesis principal era que la pasta base de cocaína llegaba al laboratorio en avión, en grandes cantidades, y allí se refinaba hasta convertirla en clorhidrato de cocaína (polvo de cocaína). Posteriormente se embalaba, cruzaba el río Guaporé hasta Brasil, donde se cargaba en lanchas o camiones y se cargaba en camiones en Comodoro.
Las investigaciones continuarán para identificar a los involucrados en la refinación o transporte de la sustancia estupefaciente en Brasil, además de las rutas utilizadas y el destino final de la droga. (Javier Bonilla)
