Lo que la Guerra nos Enseña: Navegación Resiliente como Clave de Supervivencia

UAV Navigation – grupo Oesia fue una de las empresas que participó el pasado 17 en el evento “La importancia de un PNT robusto en las Fuerzas Armadas españolas” organizado por Grupo Edefa en la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Telecomunicación de la Universidad Politécnica de Madrid.

Los conflictos recientes, particularmente en el flanco oriental de Europa y en otros teatros operativos donde la guerra electrónica es constante, han revelado una realidad incuestionable: en el dominio aéreo no tripulado, la supervivencia operativa depende de la resiliencia del sistema de navegación. Cuando el entorno degrada, suplanta o niega por completo las señales GNSS, la precisión deja de ser un atributo deseable para convertirse en un elemento esencial de la misión. La capacidad de mantener el control, conocer la propia posición y navegar con autonomía determina si una operación puede completarse con éxito o si la plataforma queda comprometida.

Para UAV Navigation–Grupo Oesía, esta conclusión no es nueva. Nuestra tecnología se ha forjado a lo largo de más de veinte años de operaciones reales, integraciones en plataformas de muy distinta naturaleza y validaciones en escenarios extremos. Este enfoque, altamente especializado, centrado en un único producto soberano de guiado, navegación y control, nos ha permitido convertirnos en una de las pocas compañías del mundo cuya tecnología se emplea de forma global, con más del 90% de nuestros clientes fuera de España y presencia en conflictos reales en distintos continentes. La robustez no se construye en un laboratorio: se consigue en campo, y se valida bajo presión táctica.

La resiliencia PNT: una arquitectura en tres niveles

La experiencia acumulada demuestra que la resiliencia no depende de una única tecnología, sino de un ecosistema de protección en tres capas, tal y como reflejan nuestros marcos de trabajo internos y materiales técnicos

1. Nivel GNSS / antena: la primera línea defensiva

Incluye la cooperación estrecha con socios tecnológicos para desarrollar receptores avanzados, servicios autenticados (PRS, OSNMA etc.) y antenas CRPA (Controlled Reception Pattern Antenna o Antena de Patrón de Recepción Controlado) capaces de atenuar interferencias y formar nulos hacia fuentes hostiles. Aunque crucial, esta capa nunca es suficiente por sí sola, ya que incluso las mejores defensas pueden ser saturadas.

2. Nivel de continuidad táctica: navegación inercial

Cuando las interrupciones GNSS son intermitentes, los sistemas inerciales, combinados con los sistemas de datos aire, permiten sostener la navegación con niveles de deriva asumibles según la clase del IMU. Este es el terreno donde la ingeniería tradicional marca diferencias, pero también donde se evidencian sus límites: toda solución inercial acumulará una deriva con el tiempo, es decir un error en su posición, y en misiones prolongadas esa deriva se acumula y puede evitar batir un blanco con precisión o aterrizar de forma segura en la embarcación de recuperación.

3. Nivel avanzado: navegación alternativa para pérdidas prolongadas

La tercera capa de resiliencia, aquella a la que muy pocas organizaciones llegan a ser capaces de desplegar de forma efectiva como productos reales lejos ya de un laboratorio o entorno de pruebas favorable, es la que permite realmente operar en entornos altamente contestados durante largos periodos manteniendo precisión, continuidad y capacidad de decisión. Cuando el GNSS deja de ser una referencia fiable, la navegación ya no puede depender de un único sensor ni de una sola técnica; exige ampliar la mirada y preguntarse qué otros observables del entorno pueden ayudarnos a responder, con certeza operativa, a la pregunta fundamental: ¿dónde estoy? ¿qué puedo usar para localizarme?

En este nivel, la clave no reside en un único sistema infalible, sino en la combinación inteligente de múltiples fuentes de información, cada una aportando una parte de la solución. Se trata de interpretar el entorno, extraer patrones, correlacionar observaciones y, en conjunto, reconstruir una navegación robusta allí donde ninguna referencia individual sería suficiente.

Uno de los avances que más valor ha aportado en esta capa es la navegación basada en visión artificial, un campo en el que UAV Navigation–Grupo Oesía ha sido pionero. Tecnologías que combinan distintos algoritmos permiten operar tanto en condiciones diurnas como nocturnas, utilizando mapas propios o precargados y ofreciendo una alternativa real al GNSS con continuidad y precisión probadas en entorno operativo.

Pero la visión no es la única apuesta. Como empresa especializada en tecnologías de navegación avanzada, continuamos investigando activamente en conceptos complementarios, desde señales de oportunidad hasta métodos de navegación basados en modelos solares o en la interacción con el terreno, ampliando el abanico de observables disponibles para garantizar resiliencia incluso bajo escenarios operativos con inhibiciones prolongadas.

Esta tercera capa es, en definitiva, la que habilita operaciones reales en escenarios disputados, donde el vehículo debe seguir avanzando a pesar de que todo a su alrededor trabaja activamente para impedirlo.

Validación en escenarios de máxima exigencia

La resiliencia no basta con afirmarla: hay que demostrarla.

Nuestros sistemas, como el autopiloto VECTOR y el sistema de navegación visual VNS01, consolidado como estándar de facto en numerosos programas desde hace más de cinco años, han sido puestos a prueba en algunos de los entornos más exigentes del mundo. Estas validaciones abarcan tanto operaciones reales en distintos teatros del flanco oriental europeo como su participación en ejercicios internacionales de referencia, entre ellos el Jammertest de Noruega, considerado el evento más exigente en evaluación de resiliencia PNT/GNSS.

En este contexto, la combinación multisensor y la inteligencia algorítmica de nuestras soluciones demostraron su capacidad para mantener la operatividad bajo ataques avanzados de jamming y spoofing, identificando y descartando señales comprometidas y proporcionando una navegación alternativa fiable incluso en escenarios de negación prolongada. Estas pruebas se complementan con la experiencia adquirida en teatros reales de operaciones, donde la presión táctica, los sistemas C-UAS y la presencia continua de contramedidas obligan a evolucionar y perfeccionar nuestras arquitecturas de navegación. Es ahí donde se confirma, sin margen de duda, que la resiliencia es un requisito operacional y no un mero atributo técnico.

Miguel Ángel de Frutos participó en la mesa que analizó los retos a los que se enfrenta la industria.

Nuevas fronteras en navegación resiliente: señales de oportunidad, campos naturales y la próxima generación del PNT

La evolución del entorno operacional obliga a explorar nuevas vías para reforzar la tercera capa de resiliencia PNT. Más allá de las técnicas consolidadas, están emergiendo enfoques que ampliarán de forma decisiva las capacidades de posicionamiento, navegación y sincronización en los próximos años. Uno de los ámbitos con mayor proyección es el uso de señales de oportunidad, aprovechando emisiones existentes, como redes 4G/5G, TV digital o satélites LEO, para obtener referencias de posicionamiento y tiempo de manera pasiva y distribuida. UAV Navigation–Grupo Oesía participa activamente en esta línea mediante un proyecto europeo desarrollado junto a la Agencia Espacial Europea (ESA) y la empresa Inster–Grupo Oesía, en el que se exploran nuevas soluciones de navegación resiliente basadas en señales de constelaciones de satélites en órbita baja (LEO) como alternativa y complemento al sistema GNSS.

Paralelamente, cobran impulso técnicas basadas en campos naturales, como la navegación magnética o la basada en anomalías gravitatorias. La disponibilidad de sensores cuánticos de nueva generación permite medir variaciones del campo magnético terrestre con precisiones antes inalcanzables, compararlas con mapas de anomalías y obtener referencias absolutas sin necesidad de señales externas. Algo similar ocurre con el estudio de las anomalías gravitatorias mediante acelerómetros y gradiómetros de ultra alta sensibilidad, que abre la puerta a sistemas de navegación pasivos, discretos y resistentes a las contramedidas electrónicas, hoy en fase de demostración pero con un potencial disruptivo evidente.

A su vez, el futuro de la resiliencia PNT no depende únicamente de la posición, sino también del tiempo. Históricamente, el GNSS ha proporcionado la referencia temporal común que permitía sincronizar plataformas, sensores y redes. Cuando esa referencia desaparece, aparece el mismo problema que en la navegación: la deriva, en este caso temporal. Mantener una sincronización adecuada exige combinar relojes internos de alta estabilidad, que reducen la deriva, con fuentes alternativas de tiempo que permitan re-sincronizar periódicamente el sistema. Tecnologías como la comunicación óptica en espacio libre (FSOC), capaces de proporcionar ranging y timing extremadamente precisos entre nodos de una formación, abren la puerta a arquitecturas distribuidas en las que la sincronización deja de depender de un único punto GNSS y pasa a ser una propiedad de la red completa.

Estas líneas de trabajo ilustran una tendencia clara: la resiliencia PNT no es un destino, sino un proceso continuo de innovación. A medida que las amenazas evolucionan, también lo hacen las técnicas que permiten conocer la posición, coordinar plataformas y sostener la operación autónoma en los entornos más complejos. UAV Navigation–Grupo Oesía seguirá avanzando en esta dirección, explorando nuevos observables, nuevas fuentes de tiempo y nuevas arquitecturas para garantizar que la autonomía siga siendo posible incluso cuando todo alrededor trabaja activamente para negarla.

Conclusión: la navegación resiliente no es un complemento; es un requisito estratégico

La guerra moderna ha dejado claro que, sin un posicionamiento fiable, no existe ISR, no existe guiado de precisión, no existe autonomía táctica. Todo empieza en el PNT. Las soluciones de UAV Navigation–Grupo Oesía, forjadas en más de dos décadas, empleadas en operaciones reales en distintos continentes y basadas en un producto soberano y especializado, han demostrado que la resiliencia no es una promesa, sino una capacidad tangible.

Una capacidad que hoy, más que nunca, marca la diferencia entre operar… o quedar fuera del combate.

(Miguel Ángel de Frutos, Director y CTO de UAV Navigation–Grupo Oesía)