Así lo confirmó durante la semana pasada el ministro de Defensa, Jean Yves Le Drian, quien explicó que 2013 ha supuesto un ejercicio de “grandes resultados” que se deben sobre todo a ocho grandes contratos, superiores a los 200 millones de euros, que Francia ha conseguido cerrar, además de señalar que los misiles franceses siguen consolidándose como "pedido estrella”. Estos datos contrastan con los de 2012, donde se las ventas se hundieron más de un 25% respecto a 2011 al alcanzar 4.800 millones de euros. Aun así, se sigue todavía lejos de picos como el de 2009, año en que se alcanzaron unas ventas históricas de 8.100 millones de euros.
Entre los principales clientes destacan países como Arabia Saudí, Singapur o Marruecos, pero es en Oriente Medio donde la industria francesa ha vuelto a cobrar una particular importancia en 2013, al haber conseguido el 40% de sus ventas totales. Por detrás en el desglose por regiones, el norte de África abarcó una cantidad importante, con un 11% mientras que el sudeste de Asia llegó al 16% y un 9% con América Latina.
Estos resultados han permitido subir de nuevo un peldaño en el ranking de principales potencias mundiales de exportación después de haber perdido esta cuarta plaza el año anterior a manos de la industria israelí, aunque Francia sigue todavía mirando muy de lejos a un podio que en estos momentos está conformado por Estados Unidos, Rusia y Gran Bretaña. (J.Martínez)
