(defensa.com) 2013 ha sido un año histórico para Corea del Sur en lo que a exportación de armamento se refiere, alcanzando la cifra de 3.400 millones de dólares. Según confirmó la Administración del Programa de Adquisiciones de Defensa del país (DAPA), esta cifra supone un incremento del 41% respecto a 2012, año en que la industria armamentística surcoreana vendió material por un montante económico de 2.400 millones de euros.
Estas mismas fuentes confirmaron que esta cifra es hasta 14 veces mayor que la que se consiguió en 2006. Una parte considerable de estas exportaciones han sido equipos de defensa aérea y naval. DAPA ha considerado estos datos como “significativos”, al impulsar “la competitividad” de las empresas del país dedicadas a esta actividad, además de conseguir que el sector se especialice en otros mercados exteriores que actualmente se encuentran en crecimiento.
En lo que se refiere al destino de las transacciones comerciales, han estado en su mayoría localizadas en las regiones de Oriente Medio y América Latina. Por orden de trascendencia, destaca el contrato logrado con Iraq por la firma Korea Aerospace Industries (KAI) para vender hasta 24 aviones ligeros de ataque T-50 “Golden Eagle” en un contrato valorado en 1.100 millones de dólares (que podrían seguir incrementándose hasta los 2.000 millones). El contrato también comprende el soporte logístico y entrenamiento del personal durante 20 años.
En lo que respecta a América Latina, uno de los acuerdos más importantes fue el que se cerró en septiembre después de que el Servicio Industrial de la Marina de Perú (SIMA) seleccionase la patrullera presentada por el astillero surcoreano STX Offshore y Shipbuilding para poner en marcha hasta cinco nuevas patrulleras marítimas de 500 toneladas. En el proceso de concurso, la oferta surcoreana resultó la más competitiva en cuanto a características operacionales, equipamiento, armamento automatizado y precio, al cerrarse en los 82,25 millones de dólares.
Todos estos datos concuerdan con los objetivos propuestos por Corea del Sur, que en 2010 tenía previsto llegar a exportar armamento por valor de 4.000 millones de dólares para 2020, objetivo que quedaría al alcance de la mano después de los datos del pasado año. A través de este plan, que comprendía un apoyo sustancial del gobierno a la industria armamentística exportadora del país, se contribuiría a crear 50.000 nuevos puestos de trabajo gracias a un incremento en el volumen de producción al año que podría llegar a los 10.000 millones de dólares.
