El BMR y La Legión, el valor de 35 años
Coronel J.M Martel
El BMR (Blindado Medio a Ruedas) forma parte de la historia de La Legión. Su llegada en los años ochenta a Ceuta y Melilla supuso un notable salto en calidad y potencia de combate para sus Banderas I y V y sirvió para demostrar que, si bien el espíritu guerrero de los legionarios está asociado a la lucha cuerpo a cuerpo, La Legión siempre ha estado al lado de las nuevas tecnologías y de las más avanzadas tácticas, técnicas y procedimientos.
La llegada de los BMR coincidió con la creación de la Bandera de Operaciones Especiales de La Legión (BOEL), lo cual pudo ser providencial en aquel momento de indefinición del futuro, tras una reorganización que disolvía las banderas III y VI y que, tras el repliegue del Sahara, no encontraba claramente su sitio como fuerza de choque y resolutiva. Visto desde una perspectiva global, por primera vez España contaba con un desarrollo moderno de la industria nacional y el vehículo era envidiado por muchos países.
El balance de la relación entre el vehículo y La Legión, aunque con alguna sombra, siempre ha sido positivo. El BMR ha dado protección en muchas de sus misiones, velocidad, apoyo de fuegos y, sobre todo, oportunidades para reivindicarse como la punta de lanza de nuestro Ejército. Las sombras derivaron de los límites de su protección contra determinadas municiones y explosivos y de una conducción a veces complicada de un vehículo muy rápido y con un centro de gravedad alto y desplazado hacia...
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