¿Desea recibir notificaciones de www.defensa.com?
X
Miércoles, 8 de mayo de 2024 Iniciar Sesión Suscríbase

SAM, el programa de misiles del Ejército de Tierra para sustituir los Hawk

España es uno de los pocos países que usan aún el Hawk y el Ejército de Tierra se plantea ya la búsqueda de un sustituto. (Octavio Díez Cámara)

SAM (Surface to Air Missile) es el nombre que se le ha dado a la solución con la que se pretende reemplazar al sistema estadounidense de Defensa Antiaérea zonal Hawk en el Ejército de Tierra.

Del Programa SAM de momento sólo sabemos que se incluye, junto a la modernización del sistema NASAM, la adquisición del misil Mistral III y la modernización del sistema de misiles Patriot, dentro de lo que va a ser la potenciación de la capacidad de Defensa Antiaérea puntual, zonal y antimisiles del Ejército de Tierra durante la década actual.

La última vez que visité el Regimiento de Artillería Antiaérea Nº 74, que reparte en instalaciones de El Copero y de San Roque media docena de baterías del sistema de misiles antiaéreos Hawk, se situaba en 2025 la fecha en la que se pensaba retirar del servicio. Cada batería incluye 6 lanzadores triples, lo que sumados todos hace que se puedan generar despliegues en los que haya un total de 108 misiles listos para ser disparados contra sus objetivos.

Los radares asociados al sistema Hawk son efectivos, aunque su tecnología es antigua y presentan algunas obsolescencias derivadas de su edad. (Octavio Díez Cámara)

Necesidad clara

La modernización de sus lanzadores a un diseño digital realizada en Grecia, la recepción de nuevos lotes de misiles que han quedado disponibles en otras naciones y hasta la llegada de algún radar adicional, entre otras actuaciones, han permitido dar un impulso al sistema del Ejército de Tierra de forma que se dijese oficialmente que su uso, al no poderse abordar un sustituto, continuaría durante esta década e incluso en la primera mitad de la siguiente; se sabe que algunos lanzadores han sido cedidos y enviados a Ucrania.

Pese a esas actuaciones positivas, el hecho de que el Ejército de Tierra ya defina al Programa SAM como uno de los que tiene en marcha de cara al futuro más o menos inmediato es toda una revelación positiva. Se trataría de aprovechar la mayor afluencia económica para iniciar los estudios y las validaciones que permitan identificar qué sistema de misiles cubre una capacidad similar al Hawk, que recordemos tiene un alcance de unos 40 kilómetros e incluye misiles específicamente diseñados con capacidad antiaérea y antimisil.

Los lanzadores se han ido digitalizando para incidir en que puedan seguir activos hasta principios de la próxima década. (Octavio Díez Cámara)

A día de hoy parece improbable que la industria española sea capaz, por si misma de ofrecer una solución con las capacidades tecnológicas que se pretenderían. Lo óptimo sería algún acuerdo internacional para escoger alguna solución que comparta misiles, equipos, radares, …, con naciones aliadas y amigas, de forma que su evolución a futuro sea compartida.

La llegada de sistema antiaéreo seleccionado dentro del Programa SAM del Ejército de Tierra es de lo más positivo al sumarse a otras actuaciones que, tomadas en conjunto, van a permitir al Ejército de Tierra disponer de sistemas complementarios que cubran a la perfección las necesidades de actuar contra sistemas aéreos controlados a distancia, helicópteros, aviones de combate o incluso misiles de crucero y balísticos hasta casi mediados de siglo.

La mayor disponibilidad económica en los presupuestos del Ministerio de Defensa de los próximos años, evolucionando hacia el 2% del Producto Interior Bruto, va a permitir que el Ejército de Tierra aborde la necesaria renovación de equipos que, poco a poco y por causas que van desde las tecnológicas a su antigüedad, han ido situándose cerca de su obsolescencia. (Octavio Díez Cámara)




Copyright © Grupo Edefa S.A. Prohibida la reproducción total o parcial de este artículo sin permiso y autorización previa por parte de la empresa editora.