Las que se concedan serán del Mérito Militar, del Mérito Naval y del Mérito Aeronáutico según que la persona, el lugar en que se realicen los hechos o su propia naturaleza estén relacionados con el Ejército de Tierra, con la Armada o con el Ejército del Aire, respectivamente.
Las Grandes Cruces al Mérito Militar, Naval y Aeronáutico, creadas el 3 de agosto de 1864, el 3 de agosto de 1866 y el 30 de noviembre de 1945, se encuentran reguladas en un Real Decreto del 1 de agosto de 2003, por el que se aprueba el Reglamento general de recompensas militares. Dichas recompensas se conceden, tanto a Oficiales Generales de las Fuerzas Armadas y de la Guardia Civil, como a Oficiales Generales extranjeros y a personal civil; en este último caso, cuando así lo justifique el rango institucional, administrativo, académico o profesional de la persona recompensada.
Para la concesión al personal civil será preciso que los servicios o méritos por los que se concedan sean distinguidos y estén relacionados estrictamente con las actividades propias de la Defensa Nacional y, preferentemente, del ejército que se trate.
En las propuestas para militares españoles se recogen, no solamente las que elevan los jefes de Estado Mayor, sino las elevadas por Autoridades del departamento y el director general de la Guardia Civil. Las Grandes Cruces con distintivo blanco se conceden por méritos, trabajo, servicios o acciones distinguidas en tiempo de paz.
En lo que a militares extranjeros se refiere, las propuestas concentran las que habitualmente se remiten a lo largo de los últimos meses, ya que en la práctica totalidad de los casos requieren el beneplácito de sus respectivos Gobiernos.
