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Jueves, 25 de abril de 2024 Iniciar Sesión Suscríbase

Mejoras para los carros Leopardo y vehículos de combate Pizarro del Ejército de Tierra

El General Jefe de la Brigada  Acorazada "Guadarrama" XII, general Javier Antonio Miragaya Prieto, explicó durante su exposición en el evento Vehículos de Combate del Ejército de Tierra del siglo XXI, organizado por el MALE con la  colaboración de Grupo Edefa, las prioridades de modernización de los carros Leopardo 2E y los vehículos de combate de infantería Pizarro.

En el marco de su ponencia “Papel actual de los vehículos de combate en servicio de nuestro Ejército. Experiencias obtenidas en la Operación eFP, VJTF y otras operaciones” el general Miragaya partió de la experiencia obtenida por su Brigada en el marco de la Fuerza de Presencia avanzada reforzada o enhanced Forward Presence (eFP) Letonia de la OTAN y las recientemente obtenidas en el despliegue en Noruega del Grupo Táctico “León”, formado por la BRIAC XII, que se desplazó entre marzo y abril a este país a las macro maniobras de la Alianza  Brilliant Jump 22.

Tras describir el escenario noruego y las duras condiciones climáticas en las que se han realizados las maniobras, el general expuso las mejoras que deberían de aplicarse a los principales  medios de combate de su Brigada, y del Ejército de Tierra, desplegados en dichos escenarios.

Del Vehículo de Combate de Infantería (VCI) Pizarro, (detalló que a fin de poder asegurar su movilidad en estos despliegues en climas extremos se les han debido integrar crampones) destacó la importancia en el ámbito de la protección, apuntando a las redes miméticas, la protección contra explosivos improvisados o Improvised Explosive Device (IED) y los necesarios sistemas de protección activa contra misiles contracarros y drones de ataque.

Las mejoras para su eficacia en combate pasarían por una optimización de la actual potencia de fuego: se ha identificado que el jefe de vehículo debería de poder contar con una ametralladora remota con actuación de 360º (una Remote Combat Weapon Systems (RCWS)) que, con independencia del tirador, permita incrementar la protección del vehículo y actuar contra objetivos intermedios sin usar el arma principal del Pizarro, el cañón automático de 30 mm.

Además, esta protección se incrementaría si la Unidad pudiese contar con drones o vehículo aéreos no tripulado de observación o ataque y defensa contra éstos mismos sistemas. La potencia de fuego aumentaría asimismo con la incluso de sistemas electroópticos más avanzados y el desarrollo de municiones con más prestaciones de tipo perforante y contra helicópteros y drones. También se debería mejorar su integración en el sistema de Mando y Control con trasmisiones con mayor alcance y avanzar en la integración con el combatiente a pie con el VCI Pizarro.

Los carros de combate Leopardo 2E

Respecto a los Leopardo 2E, al igual que en el Pizarro, se ha identificado que se debe mejorar tanto la protección pasiva como la activa, destacando el general la importancia de que contara con un sistema de alertadores láser que pueda alertar a la tripulación ante una medición láser previa a un disparo y sistemas de protección activa para la neutralización de los proyectiles que dispare el enemigo.

Para mejorar la potencia de fuego del Leopardo 2E, el general Miragaya Prieto incidió en una RWS armada con una ametralladora de 12,70 o un lanzagranadas de 40mm. Con este sistema el jefe de carro pueda dar respuesta a elementos a pie que quieran atacar al medio a distancias próximas con armas anticarro portátiles, también permitiría neutralizar, en zonas urbanas, a enemigos que desde lo alto de edificaciones puedan batir al carro, y permitan un mayor grado de vuelo de elevación que los actuales sistemas de observación anexos al cañón y la ametralladora coaxial.

Destacó asimismo que el Leopardo debería contar con una unidad de potencia auxiliar de más altas prestaciones, que permita ahorrar combustible, desgaste de motor y desgastes de la baterías, y que además proporcione una mayor discreción, dado que genera mucho menos ruido que la propulsión principal. Insistió finalmente en la necesidad de integración de sistemas de drones y en mejorar los sistemas radios, buscando equipos de mayor alcance, para incrementar la capacidad de mando y control. (Julio Maíz Sanz)

Fotografía: Carro de combate “Leopardo” 2E del Ejército de Tierra en Noruega en el Brilliant Jump 22. (foto BRIAC XII)


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