
Superado un complejo periodo, el fondo de inversión Black Toro Capital (BTC) y el Grupo industrial catalán Anangu han inyectado más de 27 millones de inversión en apenas seis meses en Carbures, que daba entrada a los dos socios financieros mediante una ampliación de capital. Ambas, se informaba el pasado mes de mayo, han mostrado su interés en seguir aumentando su participación en la compañía, lo que será realizado mediante la consiguiente ampliación de capital.
BTC y Carbures reforzaban así su compromiso por profundizar en los circuitos internacionales de financiación, especialmente en el circuito anglosajón, concretamente en el mercado norteamericano, en el que existe una gran experiencia y un claro entendimiento de empresas de carácter tecnológico e industrial con un gran potencial de crecimiento y, por tanto, en los que se apuesta firmemente por ellas. Rafael Contreras afirmó que los recursos financieros obtenidos van a permitir “consolidar su proceso de crecimiento orgánico para afrontar el incremento de pedidos en las fábricas de los sectores tanto aeronáutico como de automoción”. Según Contreras Carbures refuerza con ello una capacidad industrial que le permitirá "acompañar el incremento en el número de aviones fabricados por gigantes como Airbus, así como afrontar los futuros pedidos de piezas de coches en series largas”.
Carbures es un grupo industrial especializado en la ingeniería y fabricación de estructuras con materiales compuestos, como la fibra de carbono, para los sectores relacionados con la movilidad, como el aeronáutico, la automoción, el ferroviario, el deportivo y el de obra civil. A lo largo de una década, Carbures ha desarrollado una tecnología propia que le posiciona como la compañía líder en Europa en la fabricación, tanto en series largas como cortas, de piezas de fibra de carbono para aviones, coches, trenes, bicicletas y estructuras y vigas de construcción.