Rompiendo las decisiones más recientes de otros países, que focalizan sus compras de nuevas pistolas en modelos de reciente factura en los que sobre todo se opta por armazones de polímero que inciden en su menor peso y mejor ergonomías, el Gobierno de Filipinas acaba de anunciar una compra que va a reforzar la capacidad, en lo que a sistemas de armas se refiere, de sus Fuerzas Armadas.
La noticia es que el Ministerio de Defensa Nacional acaba de contratar con la empresa local ARMSCOR la compra de nada menos que cincuenta mil nuevas pistolas que serán usadas por diferentes unidades. Las mismas, producidas en una planta del país, están basadas en un concepto ya conocido y ampliamente difundido, el de las Colt M1911 estadounidenses. De ellas toman el diseño de la corredera y de los mecanismos de disparo para integrarlos en un armazón de mayor capacidad, lo que amplía el potencial de fuego.
Se opta por un concepto de armazón en el que se pueden situar cargadores para catorce cartuchos del potente .45 ACP -esta munición tuvo su bautismo de fuego en los enfrentamientos que los estadounidenses tuvieron en Filipinas contra los juramentados moros-, número al que hay que añadir otro más que, de forma segura, puede llevarse en la recámara. La compra de cincuenta mil nuevas pistolas, que podrían entregarse este año y el próximo, sigue a otra ya acometida en 2017 por la que se recibieron otras tres mil del mismo fabricante y concepto.
Las armas se correspondían con el modelo TAC Ultra que incluye cargadores de tipo bifilar, para acoger el número de cartuchos pretendido, y modificaciones que afectan a los elementos de puntería integrados en la corredera o al propio diseño del armazón, más largo y con un raíl que permite instalar módulos compactos de luz y láser. Estas pistolas son de color negro, cuentan con cañones de 4,5” y ofrecen un notable poder de parada, pudiendo en manos de tiradores adiestrados realizar secuencias de disparo suficientemente rápidas como para neutralizar a varios sujetos. Se opta por un diseño que cuenta con una rabera modificada y con un gatillo aligerado, cambios que seguramente son una derivación del entorno deportivo para el que fue creado este concepto de semiautomáticas.
Las FAS de Filipinas asumen así un cambio en el armamento que usan sus unidades y que en general ha sido, hasta fechas recientes, bastante anticuado. La elección del .45 ACP como cartucho de esas armas cortas puede estar relacionada tanto porque lo fabrican localmente o porque cuentan con stocks especialmente amplios del mismo en sus polvorines. (Octavio Díez Cámara)
Fotografía: El lote de cincuenta mil nuevas pistolas sigue a otro de tres mil recibidas ya el pasado año. (ARMSCOR)
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El propio presidente del país recibió una de las pistolas que ahora se han contratado en mayor número. (Gobierno de Filipinas)
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Estas semiautomáticas filipinas son potentes y se caracterizan por una notable capacidad de neutralización. (ARMSCOR)
