Kenia es ya el cuarto operador africano del C-27J, aeronave que fabrica la multinacional italiana Leonardo en su planta de Caselle-Turin (norte de Italia), con lo que vuelve a recuperar la capacidad de transporte táctico que perdió tras dar de baja sus De Havilland DHC-5 Buffalo.
La ceremonia de entrega, que fue presidida por el presidente de Kenia, Uhuru Muigai Kenyatta, y tuvo lugar en un aeródromo de Nairobi el pasado 30 de enero, a donde habían llegado en vuelo los dos C-27J desde Italia. El primer C-27J destinado a las KAF (Kenia Air Force) fue visto en las referidas instalaciones de Leonardo en septiembre de 2018 y un segundo se unió a él seis meses después. Estos dos primeros aviones son parte del encargo realizado por Kenia a fines de 2017. La adquisición de los aparatos se está financiando a través de un préstamo otorgado por la entidad italiana Unicredit SpA por un valor de 198 millones, lo que habría motivado el retraso en la entrega respecto a la fecha de construcción.
Los C-27J de Kenia están equipados con las últimas actualizaciones que ha realizado Leonardo a su modelo de transporte táctico medio, que incluye una nueva suite de aviónica que cumple con todos los últimos requisitos de aeronavegabilidad civiles y militares.
Kenia es la cuarta nación africana en ordenar el C-27J después de Marruecos, Chad y Zambia. Otros clientes han sido las Fuerzas Aéreas de Italia, Grecia, Bulgaria, Lituania, Rumania, Estados Unidos, México, Australia, Perú y Eslovaquia. El C-27J Spartan fue desarrollado utilizando motores y sistemas del Lockheed Martin C-130J Super Hercules, teniendo una capacidad de transportar hasta 60 efectivos o 46 paracaidistas. En el rol médico MEDEVEC (Medical Evacuation) puede transportar 36 camillas y seis asistentes. La carga útil máxima se estima en 10 toneladas.
Con este avión continua el refuerzo de capacidades de la KAF, tras recibir el pasado mes de diciembre los primeros seis helicópteros MD 530F Cayuse Warrior, según informo defensa.com. Kenia es un elemento esencial en la lucha contra el yihadismo en esta zona de África, siendo uno de los principales aliados de los Estados Unidos. Dicho apoyo le ha llevado a sufrir ataques de los terroristas islámicos Al-Shabaab, que se infiltran desde la vecina Somalia, donde los keniatas participan con unos 5.000 efectivos en la misión de la Unión Africana denominada AMISOM (African Union Mission to Somalia).
Fotografía: Uno de los dos Leonardo C-27J “Spartan” recibidos por la KAF.
El presidente Uhuru Kenyatta durante la ceremonia de recepción de los dos C-27J “Spartan”.
