Las maniobras conjuntas de entrenamiento aéreo entre las Fuerzas Aéreas de Francia y Egipto concluyeron en este último país. En el entrenamiento, que se extendió del 30 de enero al 2 de febrero, tomaron parte aviones Rafale de ambas naciones además de cazas egipcios MiG-29M/M2, F-16 y Mirage-2000.
El comunicado emitido por Egipto destaca el nivel de sofisticación alcanzado por las fuerzas, así como el intercambio de entrenamiento y experiencias tácticas en planificación, implementación, mando y control. Estos ejercicios se enmarcan en las relaciones militares y la cooperación conjunta de la Fuerza Aérea con sus contrapartes de países hermanos y amigos. A la formación asistieron el teniente general Mohamed Abbas Helmy, comandante de la Fuerza Aérea de Egipto y piloto general de división Laurent Learbet, vicepresidente de Operaciones Aéreas de Francia, y varios jefes de las Fuerzas Armadas de Egipto y Francia.
Las primeras etapas del entrenamiento incluyeron la celebración de varias reuniones para estandarizar conceptos de combate, intercambiar experiencias de entrenamiento y realizar vuelos de entrenamiento sobre tareas operativas para las fuerzas participantes. La capacitación tiene como objetivo refinar las habilidades de las fuerzas participantes en ambos lados para lograr los niveles más altos de eficiencia y preparación para la ejecución de tareas conjuntas y la gestión de operaciones aéreas utilizando las últimas armas aéreas con alta eficiencia en diversas circunstancias.
Durante estos ejercicios pudio verse el misil aire-tierra de crucero SCALP-EG junto a los cazas Rafale egipcios, misiles de los que no había evidencia de entrada en las existencias de la Fuerza Aérea Egipcia. Esto se debía a la prohibición de Estados Unidos al acuerdo franco-egipcio porque estos misiles incluyen componentes electrónicos de procedencia estadounidense, sujetos a una licencia de exportación en virtud del Reglamento de Tráfico Internacional de Armas (ITAR), pero parece que Francia reemplazó los componentes estadounidenses por componentes franceses y logró concluir el acuerdo de 50 misiles SCALP-EG con la parte egipcia. El misil de crucero SCALP-EG es una de las demandas urgentes de la Fuerza Aérea Egipcia ya que brinda la capacidad de atacar a largas distancias mientras que el alcance de la versión de exportación alcanza los 300 km con capacidad de destrucción y fuerte penetración de objetivos duros. (Mohammed Halimi, corresponsal de Grupo Edefa en el Norte de África)
Fotografía: Parte de las tropas y los aviones que participan en el entrenamiento (Ministerio de Defensa Egipcio)
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Un misil SCALP-EG es visible delante del avión de combate (Ministerio de Defensa Egipcio)
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Los ejercicios incluyeron repostaje aéreo (Ministerio de Defensa Egipcio)
