(defensa.com) Boeing optó por el birreactor Bombardier Challenger 605 como plataforma para su programa MSA (Maritime Surveillance Aircraft), que ofrecerá al mercado un sistema de vigilancia maritime de bajo riesgo, basado en la probada tecnología de misión del P-8A Poseidon. Ofrece la potencia, carga de pago, alcance, velocidad y autonomía para misiones como antipiratería, seguridad costera y fronteriza y búsqueda y salvamento de largo alcance. Field Aviation modificará los aviones a la configuración MSA y ya he está haciendo lo propio con un Challenger 604 como desmostrador, que será presentado a futuros clientes en 2014.





