En una demostración de fuerza y soberanía, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) inició este miércoles y hasta el sábado 20 de septiembre el ejercicio militar “Caribe Soberano 200”, como parte del plan estratégico “Independencia 200”, en respuesta directa al despliegue de buques de guerra de la Cuarta Flota de la Armada de Estados Unidos y unidades de la Fuerza Aérea estadounidense en el Caribe sur.
Las maniobras combinadas, que se desarrollan en la estratégica isla de La Orchila, contemplan la partición de cazas de combate, operaciones anfibias y ejercicios terrestres durante tres días consecutivos. Participan más de 2.500 efectivos, 12 buques de guerra, 22 aeronaves y helicópteros, en lo que el ministro de Defensa, general en jefe (EB) Vladimir Padrino López, calificó como una “respuesta contundente ante las amenazas externas”.
Entre los buques desplegados destacan el patrullero oceánico AB Kariña (PO-14), los buques de vigilancia del litoral AB Guaicamacuto (GC-21) y AB Comandante eterno Hugo Chávez (GC-24), el buque de desembarco AB Capana (T-61) de la clase Capana/Alligator, el transporte multipropósito AB Los Hermanos (T-95), los patrulleros costeros AB CA Agustín Armario (PG-62), AB Serreta (PG-412) y AB Cormorán (PG-405), así como los patrulleros tipo Stan Patrol 2606 AB Págalo (PG-51) y AB Alcaraván (PG-53). También participan lanchas patrulleras Tipo A clase Punta Barima y Tipo B clase Río Orinoco II, pertenecientes al Comando de Vigilancia Costera de la Guardia Nacional Bolivariana.
En el componente aéreo, toman parte cazas Lockheed Martin F-16A Fighting Falcon y Sukhoi Su-30 Mk2, junto a drones ANSU-100/Mohajer-2 armados y de vigilancia aérea y de superficie. Sistemas antiaéreos como cañones Zu-23-2 / 2A13 y el sistema Buk M2E. Los ejercicios incluyen la realización de operaciones de desembarcos anfibios, toma de cabeza de playa, lanzamiento de tropas aerotransportadas, y patrullajes mixtos con pescadores locales.
El ejercicio se enmarca en el “Plan Independencia 200”, activado por el presidente Nicolás Maduro la semana pasada, que contempla el despliegue de fuerzas militares, policiales y civiles en 284 frentes de batalla en todo el país. Según Maduro, esta estrategia busca “defender la paz y la estabilidad” ante lo que considera un “asedio” por parte del gobierno estadounidense, que ha movilizado ocho buques de guerra, un submarino nuclear, y cazas de quinta generación Lockheed Martin F-35 Lightning II en la antigua Estación Naval Roosevelt Roads en Ceiba (Puerto Rico).
El G/J Padrino López aseguró que la FANB también ejecutará acciones de guerra electrónica, como intervención de comunicaciones, bloqueo de transmisiones enemigas y neutralización de sistemas de comando y control. “Nos hemos propuesto embarcar en nuestros buques las capacidades antiaéreas de nuestro sistema de defensa aeroespacial integral”, afirmó el ministro.
El despliegue estadounidense ha sido justificado por la administración del presidente Trump como parte de una operación contra el narcotráfico, pero Caracas lo interpreta como un intento de “cambio de régimen”. En este contexto, el gobierno venezolano ha reforzado su presencia militar en cinco estados costeros y ha convocado a la Milicia Bolivariana, que según cifras del Ministerio de Defensa venezolano cuenta con más de 4,5 millones de voluntarios. (Bernardo de la Fuente)
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