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Miércoles, 15 de mayo de 2024 Iniciar Sesión Suscríbase

El primer avión de combate F-35 para Bélgica sale de la línea de montaje de Lockheed Martin

El primer F-35A para Bélgica (Ministerio de Defensa de Bélgica)

De las instalaciones del constructor aeronáutico estadounidense Lockheed Martin en Forth Worth, Texas, ha salido el primer avión de combate F-35 para la Fuerza Aérea de Bélgica, lo que supone un importante hito para este programa.

El F-35A Lightning II supondrá según Lockheed Martin un refuerzo de las capacidades de la Fuerza Aérea y fortalecerá la alianza entre Estados Unidos y Bélgica, un socio de la OTAN en Europa. Los aviones operarán desde las bases de Kleine-Brogel, en la región de Flandes y en la de Florennes en Valonia. Entre las compañías locales que participan en el programa están ASCO, Feronyl, ILIAS Solutions, Innocom, SABCA, Sonaca y AMI Metals.

Tras la elección del avión en 2018, en 2022 comenzó la producción del primero de 34 aviones, denominado AY-01, que será entregado a su operador el año que viene, mientras tanto permanecerá en la base Luke de la Fuerza Aérea estadounidense donde se forman los pilotos y personal de mantenimiento de los clientes internacionales de F-35.

Marcas con los colores de la bandera belga (Ministerio de Defensa de Bélgica)

Un programa de alto coste para Bélgica

En octubre de 2018 Bélgica eligió el F-35A de Lockheed Martin para sustituir a sus aviones de combate F-16, programa por el que competían también el Rafale de la francesa Dassault y el Eurofighter Typhoon de Airbus. La llegada del nuevo avión a Bélgica, cuya elección ya adelantamos en enero de ese mismo año, no tendrá lugar hasta 2025. Las entregas de los primeros ocho aparatos tendrán lugar entre este año y 2024, aunque permanecerán en Estados Unidos para ir formando sus tripulaciones.

Según la Agencia de Cooperación en Seguridad y Defensa estadounidense (DSCA), la solicitud del gobierno de Bélgica de los aparatos y su equipamiento asociado tiene un coste de 5.340 millones de dólares.

A finales de 2018 analizábamos unas interesantes declaraciones del coronel Harold Van Pee, director del programa ACCaP (Air Combat Capability) del Componente Aéreo del Ejército Belga en una entrevista concedida al medio belga L’Echo con interesantes afirmaciones sobre el coste de operación del F-35 en Bélgica.

Llamaba entonces la atención el pragmatismo con el que se encaraba el mayor coste operativo de este aparato puesto que los estudios de 2013 valoraban la hora de vuelo del F-35A como 10% más caras que las de los F-16 a sustituir. Sin embargo, la hora de vuelo será finalmente un 30 % más cara, por lo que para compensar este mayor coste se volará un 30 % menos de horas, complementando este menor número de horas de vuelo con el recurso a los simuladores. Además hay que recordar que se adquirirán menos aviones puesto que los 44 F-16A serán sustituidos por 34 nuevos aviones, de ahí que el monto total de horas de vuelo también se prevea menor.

Van Pee estimaba que los costes operativos anuales de la flota de F-16A serán de 222 millones de euros, cifra que se elevará hasta los 229 millones operando el F-35A, sin embargo tampoco parecía preocuparle puesto que el documento estratégico donde se incluía el reemplazo de los aviones (Strategic Vission del Ministerio de Defensa) calculaba un coste anual de 270 millones de euros.

También se preveía reducir los costes de mantenimiento al calcular menos horas de inmovilización de los aviones gracias a su sistema de mantenimiento “modular”. No se inmovilizarán los aviones cuando se alcance un número de horas de vuelo, sino que se hará según prevea el sistema de mantenimiento integrado según el cual “solo hará falta enviar los componentes a las empresas civiles y sustituirlos por otros”, lo que también reducirá el personal necesario en nada menos que 250 personas en las bases aéreas para tareas de mantenimiento. (José Mª Navarro García)


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