Nexter integrada en el grupo franco alemán KNDS, entregará el cañón número 300 para el avión de combate Rafale. El M791, fabricado en la planta de Nexter en Bourges, es el último de una importante lista de cañones DEFA de 30 mm.
Las capacidades de esta arma mono tubo no tienen rival hasta la fecha, pues gracias a numerosas innovaciones, su cadencia de tiro es la más alta del mundo situándose en los 2.500 disparos/minuto. Dicho de otra manera, dispara 42 proyectiles en un segundo, equivalente a 1,5 kg de explosivo.
Este rendimiento permite que un solo cañón M791 sea tan eficaz como los dos cañones M550 del avión de combate Mirage 2000, cada uno de los cuales dispara 1.200 disparos por minuto. Diseñado para uso a bordo, el arma funciona con toma de gases, limitando
así la necesidad de sistemas eléctricos cuando opera en la aeronave. Esta arma, que luce el sello de probada en combate, inicialmente fue diseñado para el combate aire-aire, donde ha demostrado su eficacia para las misiones de apoyo en tierra, asegurando la precisión y reduciendo los daños colaterales
Nexter ha desarrollado igualmente una munición especial para esta arma: el proyectil incendiario explosivo semiperforante de 30x150 mm. Estos proyectiles perfilados se disparan a más de 1.000 metros por segundo, para alcanzar su objetivo más rápidamente y aumentar considerablemente su probabilidad de impacto. Gracias a una espoleta de doble seguridad y un cebador insensible a la radiación electromagnética, esta munición garantiza una seguridad perfecta para los pilotos y operadores de Rafale, incluso en entornos tan exigentes como el portaaviones Charles de Gaulle de la marina francesa. (Antonio Ros Pau)





