Marc Bloch fue indudablemente uno de los historiadores más importantes del siglo XX. Se acaba de editar un libro titulado “La Gran Guerra” que contiene dos breves ensayos: “Recuerdos de la Guerra 1914-1915” (Souvenirs de guerre, 1914-1915) y “Reflexiones de un historiador sobre las falsas noticias de la guerra” (Réflexions d'un historien sur les fausses informations en temps de guerre).
“Tuve el honor de participar en los primeros cinco meses de la campaña de 1914-1915. Ahora me encuentro en París, de baja por convalecencia, y me recupero poco a poco de una grave fiebre tifoidea que el pasado 15 de enero me obligó a abandonar el frente. Aprovecharé el tiempo libre para fijar mis recuerdos antes de que el tiempo borre sus colores, hoy tan frescos y vivos. No lo contaré todo. Hay que dejar que el olvido se lleve lo que le corresponde. Pero no quiero abandonar a los caprichos de mi memoria los cinco meses extraordinarios que acabo de vivir. Ella suele hacer de mi pasado una selección a menudo poco juiciosa. Lo llena de minucias sin interés y deja que se desvanezcan imágenes que, incluso en sus detalles más insignificantes, me habrían sido queridas. Quiero que esta vez la selección que tan mal hace quede en manos de mi razón”.
Así comienza sus recuerdos de la Gran Guerra. En agosto de 1914, al día siguiente de la declaración de guerra de Alemania a Francia, Marc Bloch abandona París para incorporarse al frente. Como oficial de infantería, comparte con sus compañeros la dura vida cotidiana en las trincheras, el caos de los enfrentamientos con el enemigo, el miedo a la muerte siempre acechando, el dolor por las numerosas pérdidas. De aquellos años terribles, de los que saldrá con su conciencia como historiador, nos ofrece un relato apasionante e impregnado de una sobria humanidad, que lo convierten en un testimonio único de historia vivida en primera persona y narrada por uno de los más prestigiosos investigadores de la historia.
Esta experiencia individual, será posteriormente reconsiderada por Bloch en «Reflexiones». El historiador estudia la guerra como «un inmenso experimento de psicología social» y, partiendo de los estados de ánimo colectivos que permiten que los prejuicios transformen una mala percepción en leyenda, analiza la formación y la difusión de las noticias falsas que circularon en las trincheras. Afirma que los historiadores han seguido con el mayor interés los progresos realizados en los últimos años en la psicología del testimonio. “Las observaciones verdaderamente valiosas son las que proceden de personas habituadas a los métodos críticos y al estudio de los problemas sociales. La gueгга fue un inmenso experimento de psicología social.
Consolarse de sus horrores regocijándose en su interés sería dar muestras de amateurismo de mal gusto. Pero ya que ha tenido lugar, conviene aprovechar sus lecciones en beneficio de nuestra ciencia. Apresurémonos a sacar provecho de una ocasión que esperemos sea única”. Así emprende una vía de investigación que marcará toda su obra, constituyendo al desarrollo de una fecunda escuela de pensamiento que sigue siendo de gran actualidad.
Marc Bloch fue el fundador en 1929, junto con Lucien Febvre, de la Escuela de los Annales, a partir de la revista «Annales dhistoire économique et sociale». Desde 1919 fue profesor de Historia Medieval en Estrasburgo y, desde 1936, de Historia Económica en la Sorbona. Durante la Gran Guerra fue oficial de infantería y terminó el conflicto como capitán condecorado con la Legión de Honor. Durante la Segunda Guerra Mundial, participó en la Resistencia francesa y, durante la ocupación alemana de Francia, fue capturado, torturado y fusilado por la Gestapo en 1944. Entre sus obras más influyentes se encuentran "La sociedad feudal", "Apología de la historia" o "El oficio del historiador", "Los reyes taumaturgos" y "La extraña derrota". (Gabriel Cortina)
Ficha técnica:
La Gran Guerra
Marc Bloch
Editorial Erasmus
137 páginas





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