La Policía Federal brasileña puso en marcha dos operativos simultáneos con el objetivo de desmantelar organizaciones criminales de tráfico internacional de drogas y lavado de dinero.
Así, alrededor de 200 policías federales, además de miembros de la Fiscalía y auditores fiscales, participan en los dos operativos en los que se ejecutan un total de 86 órdenes judiciales, emitidas por el 5º y 10º Juzgado Penal Federal de Río de Janeiro.
Operación Turf
En el ámbito de la operación Turf, policías federales cumplen, con la participación de auditores fiscales de la Receita Federal (Hacienda) y miembros de los GAECO/MPF (Grupos Especiales de Acción de Combate a la Delincuencia Organizada, integrados por magistrados propuestos por el Colegio de Fiscales y bajo la responsabilidad del Fiscal General de la República), 20 órdenes de captura y 30 órdenes de allanamiento y allanamiento, emitidas por el 5º Juzgado Penal Federal, en los estados de Río de Janeiro, São Paulo, Paraná, Santa Catarina y Mato Grosso, además de las medidas de cooperación policial en Paraguay, Emiratos Árabes (Dubai) y en particular España.
Las investigaciones, que han durado cerca de 18 meses, revelaron la existencia de un grupo responsable de la adquisición de drogas en países productores (Bolivia y Colombia), la internalización de los estupefacientes, la logística de transporte y almacenamiento en territorio brasileño y también la exportación de estas drogas y otros productos ilícitos al mercado europeo.
En total, durante la investigación se incautaron más de 8 toneladas de cocaína, tanto en Brasil como en Europa, destino final del estupefaciente. Además, se recaudaron más de 2 millones de dólares de los delincuentes, aún en fase secreta, antes del inicio de operaciones.
En el ámbito internacional, con la participación de la DEA (Drug Enforcement Administration) y EUROPOL, las autoridades brasileñas y extranjeras actuaron en franca cooperación, optimizando los resultados alcanzados contra el grupo criminal.
El nombre de la operación hace referencia a una de las formas de lavado de dinero de estas organizaciones criminales, que es la adquisición y comercialización de caballos de carreras, muy común en Sudamérica y el Cono Sur especialmente.
Operación Brutium
Como parte de esta operación, policías federales cumplieron 19 órdenes de arresto y 17 órdenes judiciales de allanamiento y captura, emitidas por el 10º Juzgado Penal Federal, en los estados de Río de Janeiro, Santa Catarina y São Paulo.
La investigación, que comenzó hace dos años, tiene como objetivo combatir el tráfico internacional de cocaína perpetrado por miembros de una organización criminal internacional, que se aliaron con las dos facciones criminales más grandes de Brasil-El PCC/Primer Comando da Capital y el CV/Comando Vermelho- para enviar cocaína desde Bolivia y Perú a varios países de Europa.
El trabajo de investigación, que contó con la colaboración de las fuerzas de seguridad de Francia, Marruecos, Bélgica, España, además de la agencia antidrogas estadounidense, la DEA (Drug Enforcement Administration), reveló la acción de integrantes de un grupo criminal que ya opera en Centroamérica y Europa en Brasil, y resultó en la incautación de armas, vehículos de lujo, más de 2 toneladas de cocaína en Brasil, Europa y África, y, por el momento, 600.000 dólares.
El nombre de la operación hace referencia a miembros de la organización criminal No Limit Soldiers, originaria de Curazao, en el Caribe, y con ramificaciones en otros países de Centroamérica y Holanda, compuesta en su mayoría por narcotraficantes.
Estas operaciones contaron con la colaboración de representantes de Hacienda, EUROPOL, DEA, Policía de Dubai y la Guardia Civil Española.
(Javier Bonilla, corresponsal del Grupo Edefa en Brasil)
