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Viernes, 29 de marzo de 2024 Iniciar Sesión Suscríbase

Desmantelan en Brasil banda de narcotraficantes que introducía cocaína en containers del puerto de Paranaguá destinados a Europa

El viernes, la Policía  y la Receita Federal lanzaron la Operación Reach Stackers, que tiene como objetivo desmantelar los grupos delictivos que operan dentro del terminal portuario de Paranaguá, uno de los principales terminales agrícolas sudamericanos. El grupo operaba y promovía el envío de cargamentos de cocaína al exterior en contenedores, sin el conocimiento del exportador, en la modalidad conocida internacionalmente como “RIP ON/RIP OFF”.

Se emitieron ocho órdenes de captura y nueve órdenes de allanamiento y captura para su cumplimiento en las ciudades de Paranaguá, Matinhos y Piraquara (Paraná). También se promulgaron medidas patrimoniales para embargar propiedades y bloquear valores existentes en cuentas bancarias e inversiones financieras.

Se trata de un desmembramiento de la Operación Enterprise, lanzada por la Policía Federal, el 23/11/2020, en varios estados de Brasil y en el exterior, para combatir un conglomerado de organizaciones criminales especializadas en el narcotráfico internacional.

Los investigados son responsables de brindar información privilegiada sobre posiciones, rutas y carga de contenedores, para subsidiar a las organizaciones criminales en acciones en el Puerto de Paranaguá, además de mover los contenedores para permitir la inserción de cargamentos de cocaína dentro del patio de la terminal portuaria. Las acciones delictivas se produjeron de manera encubierta y sin el consentimiento de la administración de la Terminal de Contenedores de Paranaguá (TCP), que coadyuvó en el desarrollo de las investigaciones.

Los acusados responderán por los delitos de tráfico transnacional de estupefacientes, con penas que pueden llegar hasta los 25 años de prisión por cada hecho perpetrado, así como por los delitos de organización delictiva y asociación para el tráfico, que pueden alcanzar los 24 años de prisión.

Además de la droga introducida clandestinamente en contenedores, en los puertos brasileños y de la región, también se utiliza periódicamente el casco de los barcos -últimamente con dificultades, ya que las autoridades descubrieron muchos cargamentos ilegales- para esconder drogas.

Una vez más, por ejemplo, 230 kilos de cocaína fueron descubiertos la semana pasada en el cofre de mar de un barco en un muelle del puerto de Santos, con destino a Bélgica.

En otros puertos del Cono Sur, como algunos uruguayos, casi con certeza operan bandas de ex falsificadores de dinero, que hoy ofrecen sellos y documentos falsos de contenedores a narcotraficantes que quieren introducir droga en contenedores ya cerrados. (Javier Bonilla, corresponsal del Grupo Edefa en Brasil)


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