Con el objetivo de integrar las capacidades del Ejército del Aire y del Espacio, del Ejército de Tierra y de la Armada en el sistema de defensa aérea nacional para mejorar la eficiencia de las operaciones de presencia, vigilancia y disuasión, el Mando Operativo Aéreo (MOA) activará el próximo lunes, 28 de octubre, el Eagle Eye 24-03 en el archipiélago canario, finaliza el 31 de octubre.
Por parte del Ejército del Aire y del Espacio participarán seis F-18 del Ala 15 de la base aérea de Zaragoza en misión Quick Reaction Alert (QRA). Se realizarán servicios de alerta temprana para continuar con el adiestramiento en la labor de Policía Aérea. Estos servicios consisten en estar en el aire en menos de 15 minutos desde la detección de una traza no identificada. Para llevar a cabo las mencionadas funciones, aproximadamente 45 militares de esta unidad, entre tripulaciones y personal de mantenimiento y apoyo, desplegarán en la base aérea de Gando, en Las Palmas de Gran Canaria.
A su vez, el Grupo de Alerta y Control (GRUALERCON), también ubicado en la base aérea de Gando, será el encargado de ejercer la vigilancia del espacio aéreo. Para ello, emplearán los datos proporcionados por los diferentes Escuadrones de Vigilancia Aérea, así como los obtenidos por los medios terrestres y navales.
El Centro de Operaciones Aéreas (AOC), constituye el puesto de mando y control durante la ejecución de la activación. Desde este centro se realiza el control táctico para las operaciones de vigilancia, policía del aire y defensa del espacio aéreo de soberanía nacional.
En el caso del Ejército de Tierra, la Unidad de Defensa Antiaérea (UDAA) ‘Hércules’ desplegará en los términos municipales de Telde y Las Palmas de Gran Canaria, y proporcionará defensa antiaérea, complementando la vigilancia del espacio aéreo. En esta operación conjunta, la UDAA Hércules está generada sobre la base del Mando de Artillería Antiaérea (MAAA) y liderada por el Grupo de Artillería Antiaérea (GAAA) I/74 de San Roque, en Cádiz.
Lanzamiento de misil Hawk de la Unidad de Defensa Anti-Aérea.
Estará formada por los sistemas de armas antiaéreos HAWK, NASAMS, MISTRAL y cañones 35/90; la Unidad de Transmisiones del MAAA; y una unidad de protección de la fuerza del BRICA XVI, lo que implicará una participación de unas 300 personas provenientes de distintas unidades localizadas en diferentes puntos de la geografía española.
El objetivo de la UDAA es el despliegue de sus unidades en los asentamientos designados, con la finalidad de poder complementar la vigilancia del espacio aéreo a través de sus sensores y proteger la zona encomendada con sus sistemas de armas terrestres ante cualquier amenaza aérea, todo ello integrado en el Sistema de Defensa Aérea (SDA). De esta forma, la UDAA contribuirá de forma conjunta y eficaz a la defensa del Territorio Nacional.
Por parte de la Armada, la fragata F-103 ‘Blas de Lezo’ operará en aguas del océano Atlántico, al sur del archipiélago canario, con el cometido de integrarse en el sistema de defensa aérea, aportando capacidades de vigilancia y defensa antiaérea.
Equipada con tecnología de última generación, la fragata ‘Blas de Lezo’ está diseñada para llevar a cabo una amplia variedad de misiones, desde defensa aérea hasta guerra antisubmarina. Su capacidad para integrarse en operaciones conjuntas y con fuerzas aliadas internacionales la convierte en un activo de alto valor para la defensa nacional. La fragata cuenta con sistemas de radar y misiles avanzados que le permiten detectar y neutralizar amenazas a largas distancias, garantizando una protección efectiva del espacio aéreo.
En esta ocasión, la activación Eagle Eye 24-03 es coincidente en tiempo y espacio con el Sirio 24, planeado y ejecutado por el Ejército del Aire y del Espacio, con el objetivo de establecer sinergias, mejorar el adiestramiento de las tripulaciones y optimizar el empleo de recursos.
La activación “Eagle Eye 24-03” por parte del MOA, y bajo el control operativo del Mando de Operaciones (MOPS), refleja los valores fundamentales de las Fuerzas Armadas: trabajo en equipo, dedicación y un compromiso inquebrantable con la defensa y seguridad de España. Esta activación no solo demuestra las capacidades militares, sino también el compromiso con la paz y la estabilidad en el territorio español.