El pasado día 22, la Comisión de Defensa del Congreso de los Diputados pidió al Gobierno que aumente de forma progresiva el presupuesto de Defensa de España hasta alcanzar el 2% del Producto Interior Bruto (PIB) según el compromiso contraído con la OTAN.
La petición fue aprobada sin el apoyo del partido Unidas Podemos, socio del presidente Pedro Sánchez en el Gobierno, pero contó con el apoyo del principal partido de la oposición, el Partido Popular.
Sin embargo, la petición no incluyó un marco temporal, es decir, no hay un compromiso sobre el horizonte en el que se pretende alcanzar el 2 % del PIB, que recordemos, según los acuerdos de Gales, era 2024. De hecho el Partido Popular rechazó solicitar la inclusión de ese horizonte temporal en la petición al Gobierno para que esta pudiera salir adelante con el mayor apoyo parlamentario posible.
España sigue a la cola de los presupuesto de Defensa en la OTAN y Europa
Recordemos que tras la anexión rusa de Crimea en 2014, la cumbre de la OTAN de ese año llevada a cabo e Gales concluyó con el compromiso de los países miembros de incrementar en diez años sus presupuestos de Defensa hasta el 2% del PIB y destinar una quinta parte de ese presupuesto a inversiones.
España ha sido uno de los países que ha incumplido sistemáticamente ese compromiso, manteniéndose en los puestos de cola de la OTAN y la UE en lo que se refiere al porcentaje de PIB destinado a Defensa.
No ha sido hasta ahora, con la invasión de Ucrania por parte de Rusia que se ha retomado el debate sobre el 2 %, como si se tratara de algo nuevo, cuando era un objetivo al que habría que llegar en dos años. Solo tras el anuncio del canciller alemán Olaf Scholz de incrementar el gasto alemán en Defensa hasta el 2 % “año tras año” y crear un “fondo especial de 100.000 millones de euros para el Ministerio de Defensa” se animaron el resto de países europeos a realizar anuncios similares.
El presidente Pedro Sánchez elegiría un programa de televisión en lugar de sede parlamentaria para anunciarlo, mencionando un 1,4 % actual que es a todas luces incorrecto, siendo más realista la valoración actual del PIB destinado por España a Defensa del 1 o 1,2 % del PIB como máximo. Esto supone que partiendo de las cifras de PIB actuales, habría que sumar al presupuesto actual destinado a Defensa en torno a 12.000 millones de euros y no los 7.000 anunciados.
Esto significa prácticamente duplicar el presupuesto, algo que resulta a todas luces imposible de conseguir en el plazo previsto, de aquí a 2024, al menos sin maquillar las cifras presupuestarias e incluir otras partidas. Estas podrían ser las de Industria con las que se financian los principales programas de Defensa, de Interior, si incluimos las remuneraciones de la Guardia Civil (un cuerpo de naturaleza militar), o Exteriores, que financia las misiones internacionales de las Fuerzas Armadas. (José Mª Navarro García)
Fotografía: El presidente del Gobierno Pedro Sánchez interviene en la sesión de control (Congreso de los Diputados)





