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Viernes, 10 de mayo de 2024 Iniciar Sesión Suscríbase

Los aviones de la Guerra Civil española reviven en La Sénia

En la localidad tarraconense de La Sénia se está realizando una interesante labor de difusión de la historia de la aviación militar española durante la Guerra Civil española, realizando replicas a tamaño natural de aviones de combate tan representativos del conflicto como el caza Polikarpov I-16 Mosca o el bombardero SB-2 Katiuska.

La historia de la localidad está muy ligada  a la aviación durante la Guerra Civil española por parte de la II República. Su uso por parte de unidades de la aviación republicana o “La Gloriosa” fue muy intenso en favor de las operaciones en Aragón, hasta que el 14 de abril de 1938, las tropas franquistas ocuparon la zona, el día antes del decisivo corte de la zona del territorio republicano a la altura de la cercana localidad mediterránea de Vinaroz. El campo de aviación pasó entonces a ser utilizado por las aeronaves de la fuerza alemana de la Legión Cóndor, que operó muy activamente desde el aeródromo hasta principios de 1939.

A principios del actual siglo, un vecino de la localidad, muy aficionado a la aviación y piloto, José Ramón Bellaubí, decidió construir una réplica de aquellos aviones que habían marcado el conflicto, comenzando con un monomotor Polikarpov I-16 Mosca, que fue el caza más moderno que utilizó “La Gloriosa”, durante la Guerra Civil.

La actividad fue paralela a la recuperación de las instalaciones del aeródromo; incluido su refugio antiaéreo y el antiguo edificio de mando, en el que se conserva la única insignia original de la Fuerza Aérea de la República española, que actualmente se ha convertido en museo. Este proceso, y la incorporación de varios colaboradores, y un primer apoyo institucional de carácter municipal, condujo a la creación del denominado Centro de Aviación Histórica de La Sénia o Centre d´Aviació Històrica La Sénia (CAHS).

El CASH también restauró un HA-220 “Súper Saeta”. (Foto Julio Maíz)

En el CASH, que se asienta actualmente en una local, a unos dos kilómetros del aeródromo, se puede ver actualmente dicho I-16, que es del tipo 10 o Súper Mosca, completado con algunas piezas originales, como un motor Shvetsov ASh-62, una planta motriz radial de nuevo cilindros, construido masivamente en la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS).

Posteriormente, ya a mitad de la pasada década, el equipo del CASH trasladó a sus instalaciones y restauró minuciosamente un reactor Hispano Aviación HA-220 Súper Saeta matrícula C-10C-92, que hoy luce tal y como sirvió en las filas del 214 Escuadrón del Ejército del Aire, “Los Tigres”. Este trabajo, y la trayectoria anterior, llevó en 2018 a la Asociación Amigos del Museo del Aire ha otorgar su premio “Martín Porta” a José Ramón Bellaubí.

Por entonces ya se estaba construyendo en las instalaciones de La Sénia la réplica de un bombardero Tupolev ANT-40, más conocido por la denominación SB-2 Katiuska, el principal bombardero que utilizaron los republicanos durante la Guerra Civil. Actualmente dichos aparatos, junto a otros interesantes proyectos en este campo se pueden ver en la sede de la CASH, además del cercano aeródromo, en el curso de una visita guiada que organiza el Ayuntamiento de La Sénia.  (Julio Maíz)


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