Dos de las naciones más pequeñas de la OTAN, Bélgica y Países Bajos, están en fase final de dotarse con navíos de última generación especializados en la caza de minas navales que aúnan las más modernas tecnologías en este campo de la guerra naval.
Curiosamente, en un evento claramente aeronáutico, los Belgium Air Force days, pudimos ver en un stand de la Armada de Bélgica una detallada maqueta que nos daba las claves de cómo serán los futuros buques cazaminas del programa conjunto belga-neerlandés denominado Mine Counter Measures Vessels (MCMV).
Cada uno de estos países OTAN recibirá seis navíos, que como podemos ver en la maqueta serán unas avanzadas plataformas con amplia variedad de medios no tripulados empleados para localizar minas navales y lograr su posterior neutralización y/o destrucción.
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Vista de babor del MCMV belga-holandés, en la proa se aprecia la Bofors de 40 Mk4. (foto Julio Maíz Gutiérrez).
Sistemas no tripulados a bordo
Su diseño está concebido para operar sistemas no tripulados, tanto los marítimos de superficie (Unmanned Surface Vehicle (USV), como submarinos o Unmanned Underwater Vehicles (UUV) y los aéreos, Unmanned Aerial Vehicle (UAV).
En la parte de estribor del navío se aprecian las compuertas del hangar multifunción, que está además dotado de una grúa retráctil, lo que permite desplegar con gran agilidad al mar diversos sistemas, vimos colgado un USV Inspector 125-S, de la firma francesa ECA Robotics, que a su vez lleva un sistema UUV. También cuenta con una amplia cubierta de vuelo para las tomas y despegues de helicópteros y/o operar desde allí sistemas de tipo UAV, como el Bofors Skeldar V-200, que se ve en la detallada reproducción.
La popa se configura como un espacio para situar contenedores, que son subidos o bajados con una grúa también situada en esa sección del navío. Esta capacidad permite una amplia flexibilidad de uso por los diversos equipos que pueden llevar los contenedores para hacer frente a múltiples misiones.
En proa destaca el cañón automático Bofors de 40 Mk4 de BAE Systems, una evolución de la clásica e incombustible pieza antiaérea sueca de 40 mm, del que ya hablamos detalladamente en defensa.com.
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Detalle de la compuerta de acceso a la bodega multifunción del nuevo MCMV belga-holandés. (foto Julio Maíz Gutiérrez).
Avances en la construcción de los Mine Counter Measures Vessels
En mayo de 2019, la estatal francesa Naval Group se hizo con el contrato para fabricar los 12 MCMV junto a ECA Robotics (ECA Groups), de los que el primero ya está en fase final de construcción, en concreto el que tiene rotulado en el casco el numeral M940, y que una vez al servicio de la Armada belga, llevará el nombre de “Oostende”.
Este Mine Counter Measures Vessels fue botado el 29 de marzo de este año, en una ceremonia en los astilleros de Concarneau (en Bretaña). Coincidiendo con la ceremonia de puesta a flote, Naval Group colocaba la quilla (primer bloque) del tercero, que será cuando se entregue también a Bélgica, el M941 “Tournai”.
Están también en fase de construcción los destinados a los Países Bajos (M840) “Vlissingen”, en los también bretones astilleros de Kership, y el Scheveningen (M841) en Rumania, aunque el casco de este último y resto de buques holandeses se construirán en los astilleros rumanos de Giurgiu Shipyard, como es habitual en otros encargos de Ámsterdam, para abaratar costes.
Estamos ante unos navíos que desplazan 2.800 toneladas, una eslora (largo) de 82,6 metros y una manga (ancho) de 17. Su velocidad máxima será de 15,3 nudos y contaran con una autonomía de unas 3.500 millas náuticas. Respecto la habitabilidad está prevista para 63 personas, de las que 33 se corresponden a la dotación básica.
La primera entrega a la Armada belga está prevista en la última parte de 2024, mientras que los otros 11 se irán poniendo escalonadamente a disposición de los dos aliados de la OTAN, entre dicho año y 2030. (Julio Maíz)
