En los últimos días hemos podido ver imágenes de los ataques que Irán realizó con todo tipo de misiles de largo alcance sobre suelo de Israel como resultado de acciones iniciales hebreas, luego sustentadas por Estados Unidos, para intentar acabar con el programa nuclear persa. La tecnología militar en manos de Irán proviene en muchos casos de acciones de ingeniería inversa sobre equipos y sistemas que han ido obteniendo a lo largo de mucho tiempo. Su evolución en lo que a capacidad militar fabril ha crecido de forma exponencial en los últimos años, un ejemplo es el conocido como Thunder 70V.
Se corresponde con un concepto de munición merodeadora (LMD, Loitering Munition Drone) que, por lo menos en apariencia, nada tendría que envidiar en lo que a capacidades y prestaciones se refiere a diseños occidentales. Irán lleva muchos años copiando diseños estadounidenses caídos en su territorio, por lo que ha desarrollado una más que contundente capacidad fabril de sistemas aéreos autónomos o UAS (Unmanned Aerial System).

Por algunos detalles externos entendemos que esto es una maqueta no funcional de la munición merodeadoras Thunder 70V desarrollada por Irán. Foto: Octavio Díez Cámara
Sobre la Thunder 70V señalar que, lo que pudimos ver y fotografiar en el marco de Lima 25 para ilustrar esta noticia, parece ser una maqueta a tamaño real del concepto de munición merodeadora que presentan a terceros para interesarlos en su obtención. Tiene cuerpo cilíndrico y un total de ocho alas que se pliegan sobre el fuselaje antes de su lanzamiento, seguramente con un sistema tubular que puede ser llevado por personal a pie o usar desde plataformas como vehículos todo terreno.
4 kilos de cabeza explosiva
En la parte delantera de esta munición merodeadora se incluye un módulo optrónico que, combinando una cámara de televisión y un captador infrarrojo, le sirve tanto para identificar sus objetivos como para dirigirse hacia ellos. Su impulso lo obtiene de una hélice trasera movida por un sistema propulsor eléctrico que se alimenta con baterías que le permiten, de forma discreta para evitar su detección y localización, volar durante 20 minutos a una velocidad máxima de 57 metros por segundo y alcanzar objetivos a 40 kilómetros del punto de lanzamiento.

El arma en primer plano, con las alas convenientemente plegadas, cabría en el tubo amarillo que serviría para lanzar la Thunder 70V en busca de objetivos. Foto: Octavio Díez Cámara
La Thunder 70V pesa unos 23,2 kilogramos de los cuales unos 4 se corresponden con la cabeza explosiva. Esta última es una ojiva de alto explosivo prefragmentada asociada a una espoleta de impacto, combinación óptima para atacar posiciones adversarias, vehículos y objetivos conocidos o de oportunidad.
Irán está demostrando con productos como esta munición merodeadora que el concepto de este tipo de armas puede ser especialmente útil en determinadas fases del combate terrestre y que invirtiendo pocos recursos económicos pueden obtenerse sistemas de un gran potencial militar y notable capacidad lesiva.





