Los grupos autonomistas de Biafra, región petrolera de mayoría cristiana al este de Nigeria, sobre el Golfo de Guinea, han presentado una demanda en Washington contra el secretario de Estado, Antony Blinken, y el secretario de Defensa, Lloyd Austin, con el objetivo de vetar las ventas de aviones Embraer Super Tucano al gobierno de Nigeria, algunos de los cuales se incorporaron oficialmente a la Fuerza Aérea de Nigeria el 31 de agosto.
Aunque ya se ha entregado la mitad del pedido, el grupo separatista Ipob (Pueblos Aborígenes de Biafra) pretende evitar la llegada de los seis aviones restantes a la Fuerza Aérea de Nigeria e intentar sacar a los demás del país. El argumento es que el gobierno nigeriano podrá utilizar el avión contra la minoría de Biafra, como ocurrió durante el conflicto entre 1967 y 1970. En ese momento, el movimiento separatista fue severamente reprimido por las fuerzas federales, con un saldo de casi 2 millones de muertes.
Actualmente, el Ipob busca convocar a un plebiscito para votar por la independencia de nueve estados nigerianos, algo que el gobierno central considera ilegal, considerando al grupo una organización terrorista. El proyecto prevé la creación de un pequeño estado independiente, que representa solo el 8% del territorio actual de Nigeria, pero concentra la mayor parte de las reservas de petróleo y gas, así como 65 millones de personas, que representan el 30% de la población del país. De momento, una guerra, parece aún bastante remota. (Javier Bonilla)