(defensa.com) Las obras de las nuevas instalaciones de la OTAN progresan correctamente y ya se encuentran a un 80% de su construcción. El levantamiento de este enorme edificio comenzó en 2010 y está valorado en aproximadamente 1.000 millones de dólares (750 millones de euros). Podrá estar listo para desempeñar todas sus funciones en 2016. La construcción de la nueva sede de la organización atlántica se aprobó en 1999, ya que en la ubicación actual, que también se encuentra en Bruselas desde 1967, se preveía una estancia temporal de unos diez años. El nuevo emplazamiento, de 32 metros de altura, tendrá un gran espacio central que estará conectado a ocho grandes salas curvas y dispondrá de tres entradas. Acogerá a los representantes de los 28 países y a los 4.200 militares y civiles integrantes de la Alianza Atlántica.
Con todo ello muchos expertos han puesto en cuestión la idoneidad de este proyecto, ya que el contexto de restricciones presupuestarias en todos los países de Europa se pone en duda si éste es el momento adecuado para poner seguir trabajando en estas instalaciones. De hecho, algunos de los países que están llevando a cabo fuertes recortes presupuestarios en Defensa siguen aportando una cantidad notable del presupuesto total de la OTAN en 2013. Así, y según el canal Actualidad RT, España contribuye el 4,3% del presupuesto civil de la organización, mientras que en la partida militar la cifra es un 4,2% del total. El gasto en Defensa en España ha retrocedido un 30% en los últimos cinco años, llegando en 2014 a 5.742 millones de euros.
Por su parte, los integrantes de la OTAN han señalado la necesidad de mudarse a las nuevas instalaciones. Según declaraciones para la prensa durante esta semana por arte de Matthew Klimow, subsecretario general asistente de la OTAN, el edificio anterior “ha superado su vida útil”.
