El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, volvió a contagiarse de Covid-19 por segunda ocasión y suspenderá sus actividades durante 10 días. Obrador, de 68 años de edad y con antecedentes de un infarto sufrido en 2013 e hipertensión, se presentó en su conferencia mañanera de este lunes 10 de enero como suele hacerlo siempre, menospreciando el uso de medidas preventivas como el cubrebocas y anunciando que tenía la voz un poco ronca y prometiendo que se haría exámenes a la brevedad. Debe ser una gripe, añadió el presidente.
Horas más tarde, López Obrador anunció en su cuenta de tuiter que el examen había dado positivo y que tenía COVID. Indicó que las conferencias mañaneras seguirán adelante, encabezadas ahora por el secretario de Gobernación Adán Augusto López.
El presidente fue cuestionado acerca de la cancelación de más de 260 vuelos de Aeroméxico por los contagios de las tripulaciones. Uno de los reporteros le hizo notar que sonaba “un poquito ronco”.
- Sí, amanecí ronco.
- En el tema de, de… Si nos puede hablar un poco de eso.
- Me voy a hacer la prueba más tarde, pero yo creo que es gripe”
Esa fue la respuesta del mandatario, quien un par de días antes informaba a los reporteros que el subsecretario de SaludHugo López Gatell, encargado de la agenda de combate al COVID, había presentado algunos síntomas, pero no tenía coronavirus.
Fue hace un año exactamente cuando el mandatario mexicano reveló que se había contagiado del coronavirus y se vio obligado a guardar cuarentena en Palacio Nacional. En aquella ocasión el presidente habría contagiado a varios de sus colaboradores más cercanos, integrantes de su gabinete de seguridad, de gobernación y economía.
Desde el inicio de la pandemia el presidente Andrés Manuel López Obrador ha sido una especie de negacionista empecinado en subestimar todo lo que ver con medidas de prevención y control de la enfermedad; desde el uso de cubrebocas hasta la vacunación de menores de edad, pasando por su insistencia en el regreso a clases en todo el país, el mandatario ha manejado en un segundo plano casi todo lo relacionado el coronavirus.
Previo a decretar el estado de emergencia sanitaria, Obrador aseguraba en sus primeras conferencias que nunca tomaría medidas exageradas como las que adoptaron otros presidentes ante la gripe aviar, en la que las Fuerzas Armadas repartieron millones de cubrebocas en las calles de las principales ciudades del país como medida de prevención.
Al inicio de la pandemia, Obrador y el doctor Hugo López Gatell estimaron en no más de 6 mil lo fallecimientos esperados entre la población. Hoy, la cifra de muertos por COVID-19 rebasa los 300 mil desde que se decretó el estado de emergencia sanitaria en marzo de 2020.
Los datos del gobierno federal al 10 de enero de 2022 indican que hay 4 millones 360 mil 219 casos positivos estimados, 313 mil 999 muertes estimadas y 300 mil 334 confirmadas, así como 158 mil 332 casos activos estimados y 600 mil 123 sospechosos (https://datos.covid-19.conacyt.mx/#DOView). (Jorge Alejandro Medellín)
