La Brigada (BRI) “Almogávares” VI, de Paracaidistas llevó a cabo su primer salto de instrucción con medidas de autoprotección en la zona de Uceda (Guadalajara), el 27 de mayo. Después de que en marzo se declarara el estado de alarma en España por la pandemia de la COVID-19, la Brigada retoma el adiestramiento, poco a poco, aunque continúa activa en la operación “Balmis”.
En esta ocasión, fue un lanzamiento paracaidista en apertura automática desde un helicóptero Chinook, en el que participaron alrededor de 70 militares. La diferencia respecto a las anteriores veces estriba en que se emplearon las medidas de autoprotección obligatorias: además de mantener las distancias de seguridad, se tomó la temperatura a todos los saltadores, que llevaban puestas las mascarillas higiénicas. Antes de embarcar, se desinfectaron las manos con gel hidroalcóholico y se pusieron los guantes de nitrilo. Aunque los Chinook pueden llevar alrededor de 20 paracaidistas, ahora es necesario dejar un asiento vacío de separación entre cada uno, por lo que la tripulación se redujo a la mitad.
También acudió hasta la zona, el jefe de la BRI VI, general Sáez, que aprovechó para hablar con quienes saltaron para conocer de primera mano sus sensaciones. Esta vez no participó, ya que se está preparando para desplegar, junto a unos 600 miembros de la Brigada, en la misión de la ONU en el Líbano a lo largo de junio.
Fuente y fotografías: Ejército de Tierra español
