EXPAL, que tomó la gestión de la planta propiedad del Ministerio de Defensa español en diciembre 2015, ha llevado a cabo los trabajos de modernización y puesta a punto necesarios para su reactivación. Durante este periodo, y de acuerdo con el plan de arranque industrial establecido por la compañía, se han contratado dentro de la región los perfiles profesionales -actualmente más de 100 trabajadores- necesarios para el desarrollo de la actividad de la planta, contribuyendo a la generación de empleo local.
Además, dicha actividad dará trabajo a empresas de servicios auxiliares de la zona. Está previsto que la producción comience en este mes de septiembre. Los componentes metalúrgicos fabricados pasarán a integrarse en la cadena de producción de las distintas fábricas que la compañía posee en España. El acuerdo de la empresa con Defensa permitió al Ministerio conservar activas unas capacidades y tecnologías consideradas de interés estratégico para la defensa nacional, conservándolas dentro del territorio español y manteniendo su independencia en aquellos productos que aseguran la operatividad de sus sistemas.