El madrileño Museo de Aeronáutica y Astronáutica de Cuatro Vientos (Madrid), que acaba de reabrir tras la pandemia del COVID-19, expone tras ser restaurados la mayor parte de su excelente colección de cazabombarderos de la extinta URSS.
Durante los últimos años el personal del Museo ha vuelto a pintar las tres aeronaves de combate de origen soviético que posee, tres Mikoyan Gurevich de sus conocidos modelos MiG-17, MiG-21 y MiG-23, quedando pendiente la del Sukhoi Su-22, que ya está en marcha. Antes de la pandemia los trabajos estaban casi completados, ahora, tras la finalización ésta y visitar de nuevo el Museo, para lo que se ha de pedir cita previa, se aprecia que dichas aeronaves han sido colocadas durante este periodo en la plataforma F.
Los profesionales del Ejército del Aire español destinados en el Museo han realizado un excelente trabajo en estas aeronaves, tres de las cuales proceden de la flota aérea de la extinta Fuerza Aérea de la RDA (República Democrática de Alemania), la antigua Alemania comunista. Destaca el trabajo realizado en el MiG-23, al que se le han aplicado con todo detalle las múltiples marcas de nacionalidad, los numerales tácticos y lo numerosos letreros. En esta noticia se puede ver en qué estado estaba este cazabombardero tras años a la intemperie en dicha plataforma.
El otro exsoviético restaurado es el MiG-17, el único que no procede de la RDA, adquirido por un empresario madrileño lo cedió al Museo a cambio de un avión estadounidense T-33, que ahora podemos ver pinchado en el techo de su empresa en la Nacional II a la altura del puente de San Fernándo (Madrid). Así, el MiG-17 del Museo ha sido restaurado con los colores gris/plateado claro con los que en su época comunista, como denotan la cocardas nacionales integradas en una estrella roja. (Julio Maíz Sanz)
Fotografía: La renovada línea de los aviones soviéticos en el Museo del Aire, en primer plano el referido MiG-23. (foto Julio Maíz Sanz/defensa.com)
