A lo largo de su vida, los cañones DEFA recibieron diversas mejoras en lo referente a materiales y recámaras, en su sistema de alimentación y en su sistema eléctrico de iniciación del disparo, permitiendo minimizar fallas e incrementar la cadencia de disparo. En Argentina este sistema de armas estaba instalado en los aviones de la Fuerza Aérea Mirage III, IAI Dagger y hoy FAdeA también lo incorpora al IA-63 Pampa III.
La Fábrica Militar “Fray Luis Beltrán” comenzó en el año 1984 el estudio para la fabricación de la munición denominada Cartucho Calibre 30mm DEFA Nacional con Proyectil de Ejercicio. Vaina, iniciador, pólvora y proyectil fueron fabricadas en ese entonces íntegramente por Fabricaciones Militares. Los primeros ensayos de funcionamiento se realizaron en diciembre de 1984, a los que los sucedió la correspondiente homologación en vuelo que se realizó en un avión Dagger.
Munición 30 mm de los cañones DEFA del Pampa III de la Fuerza Aérea Argentina.
En la constante búsqueda de recuperación de capacidades de Ingeniería, en el año 2022 Fabricaciones Militares inició el proceso de refabricación de esta munición para que los pilotos de los Pampa puedan realizar su entrenamiento de simulación de ataque con munición nacional. El proceso llevado adelante consistió en desmilitarizar munición existente, retirar pólvora vencida, medir con gamagrafía las vainas y volverlas a remilitarizar.
Características del Pampa III Bloque II
El Pampa III es un avión de entrenamiento básico- avanzado, con capacidad para misiones ligeras y/o tácticas, que se destaca por su diseño, versatilidad y performance de vuelo.
La versión Pampa III Bloque II mejora significativamente las capacidades de análisis de vuelo a través de la incorporación de un software de entrenamiento virtual, lo que favorece la formación de los pilotos e incorpora un sistema de comunicación entre las aeronaves en vuelo con tecnología de última generación que mejora significativamente su desempeño. A su vez, esta versión incluye la sustitución de componentes estratégicos para favorecer su producción, mantenimiento y operación, a través de la incorporación de sistemas nacionales e importados.
“Acá tenemos la prueba de que se pueden hacer cosas, que es mentira que hay que cerrar fábricas y dar por terminado los ciclos: Contamos con una capacidad humana y una experiencia acumulada que, junto con la innovación tecnológica, son el camino para que nuestras Fuerzas Armadas tengan un equipamiento moderno, ágil, para que puedan sostener la estrategia defensiva y con capacidad disuasoria que tiene que tener un país como la Argentina”, declaró el ministro Taiana en el acto de entrega de la munición.
Por su parte, el jefe de la Fuerza Aérea Argentina, brigadier Isaac expresó: “El armamento aéreo para nosotros es fundamental. Esta munición que estaba vencida y en desuso, hoy la hemos recuperado”, y agregó “es muy bueno para nosotros, para la Fuerza Aérea y para nuestros jóvenes pilotos que puedan tirar, practicar y hacer blanco. De eso se trata la defensa del espacio soberano”.