A propósito de la noticia reciente sobre la puesta de quilla del nuevo Patrullero Oceánico de la Guardia Civil, quisiera volver a un asunto que desde mi punto de vista estimo racional y coherente, un asunto ya tratado en diversos foros y otros artículos publicados en medios específicos profesionales, entre ellos este, como es la creación de una Guardia Costera en España.
Se trata de un asunto no baladí, pues supondría un cambio profundo en la organización de nuestras instituciones, pero que estoy seguro racionalizaría los medios y los harían más operativos, una Guardia Costera que cubra todas las necesidades de vigilancia de nuestras aguas jurisdiccionales en todos los aspectos, creación que como pienso y expongo, llevaría consigo una mayor coordinación de medios, una mejora en la interoperabilidad, y además, una racionalización efectiva en el material y en el personal, con el consiguiente ahorro presupuestario nacional.
Antes de entrar de lleno en el asunto, quiero hacer algo de pequeña historia para apostillar que lo que propongo no es una idea genial surgida de la nada.
Antes de la creación del Servicio Marítimo de la Guardia Civil (SMGC), dependiente del Ministerio de Interior, las competencias que ahora tiene las cubría totalmente la Armada que incluso tenía además las competencias que hoy tienen las Capitanías Marítimas dependientes del Ministerio de Fomento a través de la Dirección General de la Marina Mercante.
La situación actual de las competencias en la mar, en las aguas jurisdiccionales españolas, están diseminadas.
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Zona económica exclusiva de España con las reclamaciones más importantes (NACLE vía Wikipedia)
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Aguas Territoriales españolas (Escola Port Blog)
La situación actual
La Armada, que ostenta el Mando Operativo Marítimo, es responsable del planeamiento, conducción y seguimiento de las operaciones de vigilancia y seguridad de los espacios marítimos de soberanía, responsabilidad e interés nacional, estos son las aguas territoriales jurisdiccionales que incluyen Aguas Interiores, Mar Territorial, Zona Contigua y Zona Económica Exclusiva, zonas y responsabilidades que no olvidemos, incluyen las submarinas hasta el lecho marino.
Para ello dispone de sistemas de vigilancia, plataformas aéreas y plataformas navales como los Buques de Acción Marítima (BAM), los patrulleros oceánicos (OPV), los patrulleros de vigilancia costera, y los patrulleros de vigilancia interior y las unidades de buceadores, además de otros buques de acción naval y otros específicos que fueran necesarios, todos estos medios integrados en un sistema de mando y control nacional, el COVAM (Centro de Operaciones y Vigilancia de Acción Marítima de la Armada), que además está conectado con otros sistemas de vigilancia internacionales aliados.
El SMGC es la unidad de la Guardia Civil del Ministerio de Interior dedicada a la vigilancia de las aguas territoriales españolas hasta el límite exterior del Mar Territorial y excepcionalmente, fuera de ese límite. Para ello cuenta con sistemas de vigilancia, plataformas aéreas y plataformas navales como patrulleros oceánicos y costeros de todo tipo, y unidades de apoyo de buceadores, todos ellos intercomunicados por su propio sistema de mando y control.
El Servicio de Vigilancia Aduanera (SVA), de la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT), ostenta las responsabilidades de vigilancia en las aguas jurisdiccionales españolas. Para ello dispone de una flotilla de patrulleros oceánicos y costeros de diferentes tipos, y también con sus medios de mando y control.
Quiero dejar aparte, pues es algo especial pero que también podría entrar dentro del organigrama de la Guardia Costera, la vigilancia de la actividad de pesca y sus zonas, que es llevada a cabo por la Armada en coordinación y con participación de la Subsecretaría General de Pesca del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
En el sentido de las competencias, las de vigilancia de la Armada son las relacionadas con la seguridad nacional y con las de actividad de pesca de acuerdo con la Subsecretaría de Pesca; las del SMGC, con lo judicial, lo fiscal y lo administrativo en cuanto a permisos, normativas y licencias incluyendo la de los barcos dedicados a la pesca; y las del SVA, con lo relacionado con el resguardo fiscal y aduanero y contra el contrabando.
Efectivamente, son responsabilidades diferentes en la mar y para zonas definidas, si bien como ya se ha dicho, la Armada y el SVA tienen competencias en todas las aguas territoriales de soberanía, el SMGC las tiene exclusivamente en aguas interiores y el mar territorial, hasta las 12 millas desde la línea base, y excepcionalmente, más allá.
Una opción racionalizadora
Tres organizaciones con medios y personal distinto, pero ¿es posible racionalizar, coordinar y armonizar todos estos servicios y responsabilidades tanto desde el punto de vista operativo, como de economía de medios?
Radicalmente, sí, pero esto solo es posible a través de una sola organización, una Guardia Costera militarizada que integre todas las responsabilidades sobre nuestros espacios marítimos. Una Guardia Costera racionalmente potente y operativa que cumpla con todas las responsabilidades que hoy están repartidas entre los servicios descritos, que gestione y lime las asperezas y descoordinaciones existentes, una Guardia Costera que congregue los medios materiales y personales existentes en un solo organismo dirigido por el Mando Operativo Marítimo, la Armada y bajo su dependencia.
Una Guardia Costera que esté responsabilizada al completo de las tareas de vigilancia y seguridad nacional, de vigilancia judicial, fiscal y administrativa, y de vigilancia aduanera y contrabando, en todo el Mar Territorial español.
Una Guardia Costera que tenga sistemas de vigilancia, sistemas de mando y control, y medios navales y aéreos únicos, con dotaciones navales de marinos y aviadores expertos, y personal mixto de la Armada, de la GC y la AEAT de acuerdo con las necesidades, y que además, pueda estar interconectada y coordinada con la Patrulla Marítima del Ejército del Aire y del Espacio, com los Servicios de Salvamento Marítimo (SALVAMAR) y con otras agencias y organizaciones (UME, Cruz Roja, Protección Civil, Comunidades Autónomas, etc), para cualquier eventualidad.
Un servicio único que integre a sus expertos en seguridad nacional marítima, en asuntos judiciales, fiscales y administrativos, y en asuntos aduaneros, como así existe en muchos países y que funciona a la perfección y lo hacen economizando en medios y personal.
Esta integración no debiera de suponer en modo alguno limitar los medios exclusivos de la Armada dedicados a la Acción Marítima de vigilancia relacionada con la Seguridad nacional, sino que los medios de la Guardia Costera, dependientes también del Mando Operativo Marítimo, coordinen sus acciones con los propios de la Armada.
El caso del U.S. Coast Guard
Finalmente, permítanme poner a continuación la misión y las responsabilidades de la más grande de las Guardias Costeras existentes, la “US Coast Guard”, para que pueda servir de referencia al lector y pueda contrastar y en su caso apoyar o rechazar esta humilde y sencilla propuesta.
En lo relativo a la protección en la mar: la actividad humana amenaza muchos de los ecosistemas delicados, castigados y comercialmente valiosos del mar. La Guardia Costera estadounidense, salvaguarda el medio ambiente marítimo haciendo cumplir las leyes estadounidenses e internacionales y respondiendo a incidentes.
La Guardia Costera estadounidense regula e inspecciona embarcaciones e instalaciones marítimas para reducir el riesgo de incidentes de contaminación marina. Cuando ocurren incidentes contaminantes, la Guardia Costera lidera los esfuerzos de respuesta para contener el daño.
Las pesquerías estadounidenses sustentan más de 240 mil millones de dólares en actividad económica anualmente, pero casi el 20% se considera sobreexplotado. La Guardia Costera estadounidense hace cumplir las leyes ambientales que protegen a las especies comerciales y en peligro de extinción.
Los efectos del cambio climático han aumentado la importancia científica, económica y de seguridad nacional del Ártico. La Guardia Costera estadounidense tiene el único rompehielos pesado de propiedad estadounidense capaz de apoyar operaciones en el Ártico y la Antártida.
En cuanto a la aplicación de la ley y seguridad marítima: desde su creación la Guardia Costera estadounidense ha hecho cumplir las leyes aduaneras federales y ha atrapado a los evasores de impuestos. Hoy en día, su autoridad internacional y su flota hacen de la Guardia Costera moderna la principal agencia de aplicación de la ley marítima del mundo.
La Guardia Costera estadounidense patrulla las costas de Estados Unidos y aguas internacionales utilizando buques, aviones e inteligencia para detectar, interceptar e interrumpir actividades peligrosas e ilegales como el contrabando de drogas y la trata de personas.
En cuanto al transporte marítimo: la Guardia Costera estadounidense regula la operación de buques comerciales y salvaguarda el movimiento eficiente del comercio marítimo, valorado en más de 5 billones de dólares al año. Todos sus miembros pasan por una completa capacitación certificada para obtener la licencia. Así mismo, emite permisos y puede ordenar el cierre o la apertura de puertos, y los responsables de tráfico de embarcaciones dirigen los barcos en vías navegables críticas. Las marinas mercante, comercial, deportiva y de recreo, pueden navegar con seguridad por las vías fluviales de Estados Unidos gracias a la red de boyas, faros, ayudas electrónicas y por supuesto a la actuación de Guardia Costera.
Cambie el lector Guardia Costera estadounidense por Guardia Costera española, modifiquen algunos datos, y ya tienen un modelo donde mirar. (Francisco de Paula Romero Garat, Capitán de Navío (r), Asesor de Defensa)
