El Ejército de Tierra francés mejora la supervivencia del carro de combate Leclerc

La necesidad de estar mejor preparados para los combates multidominio de alta intensidad ha sido uno de los factores que habría llevado al Ejército de Tierra francés a mejorar, dentro de un programa más amplio que contempla otros cambios, la supervivencia de sus principales medios de combate terrestre. Han apostado así por incluir en sus carros de combate Leclerc un elemento que ahora es novedoso en los ejércitos occidentales pero que ya es clásico entre los blindados rusos y ucranianos que llevan cuatro años de intensa lucha tras la invasión de los primeros del país de los segundos.

Se ha realizado, por vez primera, un ejercicio de tiro en el que han participado carros de combate Leclerc franceses, adscritos al 5º Regimiento de Dragones, y carros de combate Leopard 2 del Ejército de Suiza. Las prácticas conjuntas se enmarcaban en el supuesto ZHANNIBAL.

Las estructuras de rejilla de los Leclerc franceses se incluyen en la parte superior y trasera de la torre y en la posterior de la barcaza. (Armée de terre)

Hemos podido observar que el Ejército de Tierra francés ha decidido implementar en algunos de sus carros de combate, dentro de un proceso que podría ir poco a poco aplicándose a toda la flota o a buena parte de los dos centenares que tienen en servicio, un elemento mecánico metálico fijado tanto en la parte superior y trasera de la torre como en la parte posterior de la barcaza.

Se trata, como se observa en las imágenes, de una construcción especialmente robusta y de notable tamaño que estaría llamada a evitar que drones o municiones merodeadoras impacten directamente en el blindaje del Leclerc y produzcan en el carro de combate efectos que puedan neutralizarlo o impedir que siga combatiendo.

Por lo que se puede ver, estos elementos de protección están fijados de forma sencilla a lo que es el carro de combate Leclerc que los recibe. Es bastante probable que se trate de un kit que pueda ser llevado a la zona de operaciones y, en función de la amenaza contrastada, colocado en el vehículo por su propia tripulación en un breve plazo de tiempo.

El sistema de rejillas metálicas protege tanto al blindaje de los Leclerc como a aquellos que constituyen su tripulación. (Armée de terre)

Tiene como ventaja aparente que ofrece una muy buena relación entre protección y coste. Al tratarse de un enrejillado metálico de manufactura sencilla, puede encomendarse su fabricación a pequeñas industrias propias y obtenerlo con rapidez y a un coste que permita su introducción masiva tanto en carros de combate como en otros tipos de vehículos.

Estos elementos metálicos deberían, a mi entender, adquirirse y mantenerse almacenados por si es necesario desplegar ingenios acorazados y mecanizados propios. Llama la atención que soluciones similares, fáciles de obtener y económicas de adquirir, no hayan sido consideradas por estructuras de ejércitos afines a l’Armée de terre.

Por ejemplo, en España no se avanza, de momento y de forma diligente en brindar más protección a los carros de combate Leopardo que son el “rifle” con el que la Infantería puede proyectar sus fuegos a distancias de hasta 4 kilómetros. (Octavio Díez Cámara)