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México movilizará a más de 250.000 militares por el Covid-19

Por orden presidencial, el Ejército, la Fuerza Aérea y la Marina-Armada de México se sumarán al combate y prevención del Coronavirus-19 o Covid -19, para lo cual podrían ser movilizados más de 250 mil militares, sin contar aún con los efectivos de la Guardia Nacional (GN), integrada hoy por 75 mil elementos.

La orden presidencial girada por el mandatario Andrés Manuel López Obrador el pasado 19 de marzo indica inicialmente que tanto la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) como la Secretaría de Marina-Armada de México (SEMAR) se movilizarían con todos los elementos que fueran necesarios para responder al reto del Covid-19, aplicando una versión modificada del Plan de Defensa Nacional para casos de Emergencia denominado Plan DN-III-E.

En su conferencia de prensa mañanera del jueves 19 de marzo, el presidente Andrés Manuel López Obrador adelantó, ya presionado por la crisis mundial ocasionada por la pandemia del Civid-19, anunció que las fuerzas armadas se sumarán a la estrategia de su gobierno para enfrentar la pandemia.

Obrador dijo que el Ejército y la Marina, con su experiencia y con su personal capacitado en ayuda a la población, se unirán en la aplicación del Plan DN-IIIE y el Plan Marina para reforzar la estrategia de contención del Covid-19. En la misma conferencia mañanera el presidente aseguró que no va a decretar el toque de queda, que no va aplicar el Artículo 29 Constitucional, que señala en su primer párrafo: “En los casos de invasión, perturbación grave de la paz pública, o de cualquier otro que ponga a la sociedad en grave peligro o conflicto, solamente el Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, con la aprobación del Congreso de la Unión o de la Comisión Permanente cuando aquel no estuviere reunido, podrá restringir o suspender en todo el país o en lugar determinado el ejercicio de los derechos y las garantías que fuesen obstáculo para hacer frente, rápida y fácilmente a la situación”.

Para apoyar en lo que es ya la Fase 2 del brote de la enfermedad en México, las fuerzas armadas –incluyendo a la Guardia Nacional– podrán movilizarse casi en su totalidad, lo que significaría desplazar en todo el país a una fuerza cercana a los 370 mil efectivos en conjunto. La Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) registró para este año ante Hacienda una plantilla de 230,069 efectivos, mientras que la Secretaría de Marina-Armada de México (SEMAR) reportó un estado de fuerza de 68,725 elementos y la Guardia Nacional (GN) dio a conocer hace un mes que cuenta ya con 75 mil agentes y mandos en sus 155 Coordinaciones Regionales.

Esto da un total de 373,794 elementos de las dos secretarías y la corporación que trabajarán de manera coordinada en la aplicación del Plan DN-IIIE para ayuda a la población civil en casos de desastre. Sin embargo, la participación de la Guardia Nacional en el esquema del Plan DN-III-E modificado no ha sido confirmada.

Para la aplicación del Plan DN-III-E, la SEDENA cuenta con la Fuerza de Apoyo para Casos de Desastre (F.A.C.D.), integrada por 3,200 elementos en total (el primer contingente a movilizar es de 750 efectivos) y en cuya estructura hay un Componente Terrestre, un Componente Aéreo (con un Grupo de Aeronaves de Ala Fija y Grupo de Aeronaves de Ala Rotativa), una Fuerza de Tarea para Emergencias en el Valle de México, un Agrupamiento de Ingenieros y un Agrupamiento de Servicios.

El Grupo de Respuesta de Emergencias Químicas, Biológicas y Radiológicas pertenece al Cuerpo de Fuerzas Especiales, fue creado en 2013 y lo integran 128 elementos. Es encabezada por el Capitán Segundo de Sanidad, Valerio David Fernández de Jesús, y es la única unidad capacitada para hacerle frente a emergencias biológicas, radiológicas y de tipo nuclear en donde se presenten en el país.

El grupo fue dotado con equipo especial, como tiendas de descontaminación y un Campamento Modular Multipropósito Helitransportable (CMMH) adquirido en 2017 para reforzar las tareas que esta unidad cumple en casos de emergencia especifica.  Sin embargo, pese a la capacitación especializada de los 128 elementos de este grupo, la SEDENA no incluye entre los “Principales fenómenos perturbadores” para activar el Plan DN-III-E a las emergencias biológicas, señalando que son tres los escenarios que ameritan la movilización de las tropas para ayuda a la población civil: Fenómenos geológicos, Fenómenos hidrometeorológicos y Fenómenos químico-tecnológicos.

En octubre de 2017 el entonces director general del Instituto de Seguridad Social para las Fuerzas Armadas Mexicanas (ISSFAM, el general Jesús Javier Castillo García, publicó en la Revista de Sanidad Militar el artículo Panorama de la salud en las Fuerzas Armadas Mexicanas, en el que menciona a grandes rasgos cuál es la estructura de sanidad militar y naval en el país.

“Se cuenta con 414 unidades médicas de diferentes niveles de atención que prácticamente cubren todo el territorio nacional y acompañan a las tropas de conformidad con el despliegue militar y naval.9,10 Éstas se desglosan en 342 unidades médicas de primer nivel, 64 de segundo nivel y ocho de tercer nivel, entre los que destacan el Hospital Central Militar y el Hospital de Especialidades de la Mujer y Neonatología, pertenecientes a la Secretaría de la Defensa Nacional, así como dos hospitales navales de especialidades de la Secretaría de Marina. En ellos se proporciona atención médica y odontológica general y de 63 especialidades diferentes”, señala el artículo son entrar en detalles sobre lo que tiene cada secretaría en ese rubro.

La SEMAR, al igual que la SEDENA, carece no solo de información actualizada, sino de cualquier dato estadístico abierto, de fácil acceso y amplio para conocer cuántas y cuáles son sus instalaciones médicas en todo el país, cuántos médicos, enfermeras, enfermeros, laboratoristas, médicos especialistas, camas censables y no censables disponibles.

Algunos de estos datos son accesibles solamente en publicaciones especializadas como la Revista de Sanidad Militar, en la que no hay artículos de médicos navales, solo de personal de la SEDENA.

En 2015, el general de Brigada, Médico Cirujano, DEM, Daniel Gutiérrez Rodríguez, Director General de Sanidad Militar de la Defensa Nacional, y el coronel Médico Cirujano, Gaspar Alberto Motta Ramírez, editor en Jefe de la Revista de Sanidad Militar de la SEDENA publicaron el articulo La salud en México en el futuro, en el que aparecen algunos datos sobre los sistemas de sanidad militar y naval.

Ahí se señala que la SEMAR cuenta con 11 hospitales, 21 sanatorios, 1 centro médico naval y 4 clínicas, todo esto como parte de una red de 37 hospitales, sanatorios y clínicas en las que se invirtieron al menos 9 mil 760 millones, 850 mil 888 pesos en el gobierno de Enrique Peña Nieto.

La publicación agrega que en la administración de Peña Nieto la SEDENA había contratado a “485 profesionales” de la medicina y cita las cifras del personal integrado a la estructura de atención militar: 111 médicos especialistas, 60 médicos generales, 286 enfermeras especialistas y 55 enfermeras generales, para un total de 512 elementos (no 485).

Los datos sobre la infraestructura de atención médica del ejército y fuerza aérea son sesgados y de difícil acceso público. Los documentos de Rendición de Cuentas (RD) de la Sedena elaborados al final de la presidencia de Felipe Calderón no abordan en sus 41 tomos una sola línea sobre el tema de la infraestructura de atención médica militar.

Lo mismo sucede con las Memorias o Libros Blancos de la secretaría en la administración del general Salvador Cienfuegos Zepeda. Los almirantes secretarios Marco Antonio Peyrot, Francisco Saynez, Vidal Soberón y ahora José Rafael Ojeda Durán están en la misma situación de opacidad, falta de información actualizada y de fácil acceso al público, sobre todo en momentos de contingencia como el que se vive hoy con la pandemia del Covid-19. (Jorge Alejandro Medellín)


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