(defensa.com) A pesar de las difíciles condiciones climáticas que se presentaban en la zona de páramos del municipio de Onzaga, en el departamento de Santander, los miembros del equipo de búsqueda y rescate de la Fuerza Aérea lograron llegar al lugar donde se encontraban los restos del Piper PA-31para rescatar los cuerpos del piloto y copiloto de la aeronave.
La zona del siniestro ubicada entre los páramos de Cruz Colorada y Carnicerías fue asegurada por tropas del Batallón Silva Plazas del Ejército Nacional, lo que facilitó el descenso de las unidades de salvamento de la FAC, quienes lograron asegurar los cadáveres en dos camillas que fueron extraídas del lugar por un helicóptero Black Hawk perteneciente al Comando Aéreo de Combate No.1.
Los cuerpos de Nernyr Franci Iberia, de nacionalidad brasileña y del canadiense Peter Moor fueron trasladados al aeropuerto Palo Negro de Bucaramanga, donde fueron entregados a las autoridades competentes. Igualmente, al lugar de la tragedia la Fuerza Aérea llevó a investigadores de accidentes de la Aeronáutica Civil, para que realicen la respectiva recolección de pruebas que permitirán conocer los motivos por los cuales se siniestró la aeronave con matrícula de Canadá C-GSVM.
