Realizada entre el 18 y el 29 de agosto en la Base Aérea de Ilopango, en El Salvador. Esta edición número 19 de Fuerzas Comando 2025, reunió a 16 países del continente americano en una serie de exigentes pruebas que pusieron a prueba la preparación física, táctica y técnica de las unidades de operaciones especiales. La delegación colombiana, compuesta por ocho integrantes de las Fuerzas Militares (Ejército, Armada y Fuerza Aeroespacial), logró proclamarse campeona con un desempeño sobresaliente al obtener un puntaje total de 1.955 puntos, superando a México (1.812) y a El Salvador (1.663), quienes ocuparon el segundo y tercer lugar, respectivamente.
Desde los primeros días de competencia, el equipo colombiano mostró su nivel de preparación y resistencia, liderando la tabla general al término de la séptima jornada con una ventaja mínima sobre México, campeón de la edición anterior. Sin embargo, fue en las últimas pruebas donde consolidó su posición, ampliando la diferencia en el marcador y asegurando el primer lugar. Este triunfo reafirma el dominio histórico de Colombia en Fuerzas Comando, siendo esta posiblemente su décima o hasta décimotercera victoria desde la creación del certamen en 2004, según diferentes fuentes.
Los ocho representantes del Ejército Nacional, la Armada de Colombia y la Fuerza Aérea Colombiana regresaron a casa con orgullo, honor y la decimotercera copa para Colombia en este importante certamen que reúne a los mejores.
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Tabla de clasificación de la competición.
La preparación del equipo colombiano inició desde septiembre de 2024 en el Grupo Aéreo del Oriente (GAORI), donde se sometieron a un riguroso entrenamiento que incluyó resistencia física, técnicas de tiro, maniobras en escenarios hostiles, navegación en embarcaciones tipo zodiac y operaciones aerotransportadas. Gracias a este alistamiento integral, el grupo llegó a El Salvador con un nivel de cohesión y competencia óptimos.
Durante la competencia, las pruebas exigieron marchas forzadas, recorridos de obstáculos, precisión en tiro, rescates simulados, asaltos urbanos y rurales, así como inserciones desde helicópteros, todas bajo condiciones de alta presión y realismo. La victoria no solo es un reconocimiento a la capacidad individual de los comandos, sino al trabajo en equipo y la disciplina que caracteriza a las Fuerzas Militares colombianas.
Este triunfo fortalece el liderazgo regional de Colombia en materia de seguridad y operaciones especiales, y ratifica su compromiso con la cooperación hemisférica frente a amenazas comunes como el narcotráfico, el terrorismo y el crimen organizado. El Comando Sur de los Estados Unidos, organizador del evento, destacó la participación de todos los países y resaltó el nivel profesional mostrado por los equipos, en especial el de Colombia, que se consolidó como un referente continental. (Carlos Vanegas)
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