La Armada de Colombia dio un paso importante en el fortalecimiento de sus capacidades subacuáticas, al lograr que dos de sus tripulantes sean los primeros buzos colombianos certificados para operaciones a gran profundidad bajo estándares de la OTAN. Este hito se enmarca en el "Plan de Cooperación Bilateral 2024-2025", acordado con España en el marco de la "V Comisión Mixta Hispano-Colombiana 2023", y ratifica el compromiso de ambas naciones por consolidar relaciones estratégicas en el ámbito marítimo y de seguridad.
Los marinos que completaron esta capacitación fueron el Teniente de Infantería de Marina Daniel José Sarmiento Peralta y el Suboficial Segundo Luis Fernando Gil Rodríguez, integrantes del Comando de Buceo de la Armada de Colombia. Ambos participaron durante nueve meses en los cursos de Tecnología de Buceo y Especialidad Complementaria de Buceo, impartidos por la Escuela Militar de Buceo de la Armada del Reino de España, en Cartagena, región de Murcia.
El proceso de formación incluyó entrenamientos en escenarios operacionales complejos y de alto riesgo. Los marinos colombianos destacaron en técnicas especializadas como el Buceo de Medidas Contra Minas, utilizando equipos homologados por la OTAN como el sistema AMPHORA. También realizaron ejercicios con explosivos en ambientes subacuáticos, maniobras de soldadura y corte bajo el agua, reflotamientos, y control de averías mediante simuladores avanzados como el NCAGE.
Uno de los momentos clave del entrenamiento fue la realización de inmersiones a gran profundidad a bordo del Buque de Salvamento y Rescate Neptuno de la Armada Española. Allí, los marinos colombianos operaron con mezclas de gases (oxígeno y helio) suministradas desde superficie, lo que les permitió alcanzar la certificación OTAN, inédita hasta ahora para miembros de la Armada de Colombia.
Además del componente técnico, la instrucción incluyó formación en misiones de rescate y salvamento submarino, en las cuales los participantes asumieron funciones como operadores de cámara hiperbárica, controladores de gases y líderes de equipo, destacándose por su preparación y desempeño.
Este logro refuerza las capacidades del Comando de Buceo, que hoy cuenta con 647 tripulantes en sus filas y tiene actualmente en formación a 19 futuros buzos. La experiencia adquirida por estos dos tripulantes representa un avance en la especialización técnica del personal y permite proyectar nuevas doctrinas operativas con enfoque en la interoperabilidad y la seguridad marítima internacional. (Carlos Vanegas)
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