La tripulación del 433rd Airlift Wing de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, conocido como el Ala Álamo, ejecutó una misión sin precedentes durante el Ejercicio "Estrella Austral 2025" en los cielos del norte de Chile. Por primera vez, el Ala completó una misión integrada que combinó a uno de los más grandes y potentes aviones del mundo, el Lockheed C-5M Super Galaxy, junto a cazas F-16 Fighting Falcon, en un exigente entrenamiento defensivo antiaéreo que puso a prueba las capacidades de los aviadores en un escenario estratégico de alta complejidad.
La operación, llevada a cabo en colaboración con la Fuerza Aérea de Chile (FACh), involucró a cuatro F-16 MLU Fighting Falcon chilenos, de los cuales dos de ellos fueron asignados para escoltar y proteger al C-5M Galaxy, mientras los otros dos actuaron como interceptores. Este ejercicio permitió a los aviadores del Ala Álamo, con base en Texas, perfeccionar sus habilidades tácticas en un entorno donde la superioridad aérea no está garantizada, un desafío cada vez más relevante y exigente, no solo para Chile y Estados Unidos, sino al nivel global actual.
La misión no solo benefició a la tripulación participante, sino que también sirvió como un valioso escenario de entrenamiento para los instructores de la unidad de formación del C-5M Galaxy, la cual opera el Ala. Las lecciones aprendidas están siendo integradas en nuevos programas de instrucción, con el objetivo de fortalecer la preparación y la capacidad operativa de las futuras generaciones de aviadores.
El C-5M Super Galaxy es una versión modernizada del icónico avión de transporte estratégico de la Fuerza Aérea de Estados Unidos (USAF), está diseñado para realizar misiones de transporte intercontinental de gran envergadura. Equipado con motores General Electric CF6 que ofrecen un 22% más de empuje que su predecesor, este gigante del aire puede transportar cargas pesadas y voluminosas, esenciales para el traslado de equipos y personal de unidades de élite que participaron en el ejercicio. Su arribo a Chile obedece a la planificación con EE.UU como parte de la logística y los medios aéreos empleados por ambas naciones, fortaleciendo la interoperabilidad entre las fuerzas armadas de ambos países.
El Ejercicio "Estrella Austral 2025", que reunió a fuerzas aéreas de la región y aliados internacionales, reafirmo el compromiso de Chile con la interoperabilidad y el fortalecimiento de capacidades conjuntas. La participación del 433rd Airlift Wing, una unidad de la Reserva de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, subraya la importancia de la colaboración multilateral consolidando a Chile como una fuerza aérea sólida y robusta en ejercicios aéreos de alcance global.
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Clausura del “Estrella Austral 2025”
En las instalaciones de la Brigada de Operaciones Especiales “Lautaro” del Ejército de Chile, se llevó a cabo el 8 de junio la ceremonia de clausura de la 12ª edición del ejercicio multinacional “Estrella Austral 2025”, consolidado como el entrenamiento de operaciones especiales más relevante de Latinoamérica. Durante 14 días, más de 2.700 efectivos de Chile, Estados Unidos, España, Argentina, Colombia y Paraguay se desplegaron a lo largo de 3.700 kilómetros, desde Tarapacá hasta Magallanes, demostrando un alto nivel de coordinación y capacidad operativa.
El ejercicio involucró 67 medios terrestres, 42 medios aéreos y 4 medios navales tanto de Chile como de Estados Unidos, cumpliendo los 28 objetivos planificados y distribuidos en todo Chile. Se ejecutaron un total de 37 acciones, de las cuales 20 fueron de Acción Directa, 15 de Reconocimiento Especial y 02 de Evacuación de No Combatientes. Se realizaron 193 operaciones aéreas, 99 con medios nacionales y 94 con medios de Estados Unidos, destacando 14 lanzamientos en paracaídas, 9 Misiones de Infiltración y 2 Evacuaciones Médicas.
Durante la fase de ejecución, Fuerzas Especiales de Chile, junto a sus pares de Colombia, España, Estados Unidos y el Grupo de Operaciones Policiales Especiales (GOPE) de Carabineros, realizaron una acción directa simulada para rescatar un rehén, empleando técnicas de descenso rápido (fast rope) desde dos helicópteros AS532 Cougar y dos MD530F de la Brigada de Aviación del Ejército.
La ceremonia de clausura, marcada por un salto de confraternidad y la entrega simbólica de alas de paracaidista entre los ejércitos participantes, contó con la presencia de delegaciones militares y observadores internacionales. (Luis Andrés Lautaro)
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Fotografías: 433rd Airlift Wing.






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