¿Desea recibir notificaciones de www.defensa.com?
X
Viernes, 29 de marzo de 2024 Iniciar Sesión Suscríbase

El Super Tucano evaluado en el concurso OA-X de la USAF

Embraer Defence & Security, junto con su socio, Sierra Nevada Corporation (SNC), ha sido invitado a participar en la Evaluación de Capacidad de las Plataformas de Ataque Ligero de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos (USAF), programa conocido como OA-X. SNC y Embraer participarán en el experimento con el A-29 Super Tucano, el único avión de ataque ligero del mundo certificado por la USAF. La evaluación OA-X comienza en julio en la Base de la Fuerza Aérea Holloman de Nuevo México.

El programa se enmarca en el esfuerzo de la USAF para analizar los beneficios de adquirir un nuevo avión de ataque ligero de bajo costo y que no requiera futuros desarrollos para proporcionar apoyo aéreo táctico y otras misiones, reducir costos de entrenamiento para pilotos de caza y acelerar la competencia de las tripulaciones. La iniciativa OA-X cumplirá estos objetivos, preservando y aumentando, además, la vida útil de otras flotas a reacción.

"El A-29 es especialmente adecuado para entrenar a pilotos de caza y hacerlos competentes", dijo Jackson Schneider, presidente y CEO de Embraer Defense & Security. "Eso significa que los pilotos  estén mejor entrenados, más rápidamente y de forma más barata, permitiendo que otras plataformas puedan ejecutar las misiones que desempeñan mejor"

Operado por otras 12 fuerzas aéreas en todo el mundo, el A-29 es un avión turbohélice duradero, versátil y potente, capaz de ejecutar una amplia gama de misiones de caza e ISR. El A-29 está certificado por la USAF y ha sido probado en Afganistán y en otros escenarios,  recientemente en Líbano. Por su buen desempeño y bajos costos de operación, demostrados con la Fuerza Aérea Afgana a través del programa LAS, el Super Tucano está en una buena posición inicial frente al turbopropulsor Wolverine AT-6 de Textron, segundo en la competencia LAS 2011, y el Textron AirLand Scorpion, jet ligero con unos costos operativos de 3.000 dólares por hora,  demasiado altos para estas misiones, y un desempeño inferior comparado con aviones de combate de primera línea.

La idea detrás de la convocatoria OA-X es que el nuevo avión de ataque ligero permita a la Fuerza Aérea  llevar a cabo  misiones COIN,  extendiendo la vida útil de sus reactores  de combate, realizar ahorros operacionales y evitar que su flota de 4ª o 5ª generación se involucre en conflictos de baja intensidad.

Requisitos de la USAF

Las exigencias de la USAF requieren que la aeronave sea capaz de operar desde pistas semi-preparadas tales como superficies de hierba o terrenos pedregosos. El avión tendrá que incluir varias suites de  medidas defensivas, incluyendo un sistema de advertencia de aproximación de misiles (MAWS), un receptor de advertencia de radar (RWR) y dispensadores de señuelos . La cabina y el motor deben ser  blindados.

La aeronave debe ser capaz de volar misiones de 5 horas (con reservas de combustible de 30 minutos), con un alcance mínimo ferry de 900 millas náuticas (1600 km).

Data Link: se requiere que la aeronave tenga una capacidad de transmitir y recibir imágenes fijas y de video con una línea de visión directa ( más allá de la línea de visión).

Inteligencia, Vigilancia y Reconocimiento (ISR). El avión tendrá que utilizar dispositivos  láser para designar los objetivos, así como electro-ópticos y vídeo infrarrojo / imágenes fijas HD.

Armas:  Necesitarán al menos 4 perchas de armas capaces de transportar una variedad de opciones, incluyendo bombas de 500 libras, cohetes de 2,75 pulgadas, misiles ligeros (como los  BAE  Advanced Precision Kill Weapon System o similares)  y bengalas de iluminación. El avión también será capaz de portar artillería aérea, ya sea con un cañón integrado o  montando un mini-gun.

Además, deberá ofrecer cabina presurizada y eyectores 0-0.

Algunas variantes de AT-6 serán evaluadas, así como, probablemente, el Paramount Mwari AHRLAC sudafricano, el coreano KT-1, su versión turca Hurkus, el Bronco actualizado por Boeing (cuyas modernizaciones incluirían una cabina de cristal computarizada, sensores de inteligencia y capacidades de uso de bombas inteligentes), el Combat Dragon II, de US Aircraft Corporation. Si los criterios favoreciesen al jet- bastante improbable opción- además del Scorpion, podría contarse con alternativas como el M-346 o el KA-50. (Javier Bonilla)

 


Copyright © Grupo Edefa S.A. Prohibida la reproducción total o parcial de este artículo sin permiso y autorización previa por parte de la empresa editora.