(defensa.com) El Comando de Operaciones Especiales (COpEsp), con sede en Goiânia - un componente de la Fuerza de Acción Rápida Estratégica del Ejército Brasileño- está operando a pleno rendimiento, para el adiestramiento en caída libre, su túnel de viento, siendo la primera unidad instalada con este fin en América Latina y una de las 10 que hay en todo el mundo. El entrenamiento en el túnel de viento es importante para aquellos efectivos militares que realizan misiones de infiltración operando mediante salto libre, por lo que cada hora de formación es equivalente a 100 saltos.
Funciona con la energía que proporcionan tres motores eléctricos para generar el viento suficiente que pueda sostener en el aire hasta cinco personas. Puede ser utilizado por las otras fuerzas de Defensa y Seguridad, por equipos deportivos oficiales brasileños e incluso, pagando unos 750 dólares por hora, por paracaidistas particulares. (Javier Bonilla)