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Domingo, 5 de mayo de 2024 Iniciar Sesión Suscríbase

Los 88 F-35 de Canadá reforzarán la defensa del Ártico y el Mando Norteamericano de Defensa Aeroespacial

Uno de los F-35A de los Estados Unidos, ahora también operaran con las insignias de Canadá. (foto USAF)

Finalmente, y como estaba previsto, en el marco del llamado Proyecto de Capacidades de un Futuro Caza, o Future Fighter Capability Project (FFCP), el Ejecutivo de Ottawa ha seleccionado el cazabombardero de Lockheed Martin, en su versión de despegue/aterrizaje convencional, el F-35A. Canadá anunció que adquirirá 88 aviones de combate de 5ª generación F-35 Lightning II a Lockheed Martin, como ya se llevaba apuntando hace días.

En base a lo anunciado el pasado 9 de enero, la Real Fuerza Aérea Canadiense o Royal Canadian Air Force (RCAF) recibirá 88 cazas furtivos polivalentes con los que irá progresivamente reemplazando a la flota de McDonnell Douglas (hoy Boeing) CF-188 Hornet, que empezaron a llegar a este país de la OTAN en 1982.

La Fuerza Aérea de Canadá  espera recibir el primer avión en 2026, con la previsión de obtener la capacidad operativa completa o Full Operational Capability (FOC) para toda la flota entre 2032 y 2034, según dijo la ministra de Defensa, Anita Anand. La inversión estimada para este proyecto  es de aproximadamente 19 mil millones de dólares canadienses (13.200 millones de euros). El costo total, incluido el  del ciclo de vida de la aeronave hasta 2070, se estima en unos 47.800 millones de euros.

Los F-35 se están convirtiendo en los principales aviones de combate de la OTAN. (foto USAF)

Acerca de la noticia, Bridget Lauderdale, vicepresidenta de Lockheed Martin y gerente general del programa F-35A, afirmó que “Nos sentimos honrados de que el Gobierno de Canadá haya seleccionado el F-35, y esperamos continuar nuestra asociación con la Real Fuerza Aérea Canadiense y la industria de defensa canadiense para entregar y mantener el avión”.

Los aviones de combate F-35A representarán para la Fuerza Aérea canadiense un gran salto cualitativo. Asimismo, la compatibilidad de este sistema de armas con los empleados por Estados Unidos, Dinamarca y Noruega significa un incremento del poder aéreo en Norteamérica y  el Ártico, enmarcado en el Mando Norteamericano de Defensa Aeroespacial o North American Aerospace Defense Command (NORAD), que aglutina a Estados Unidos y Canadá, y fuera creado en 1950 en respuesta a la amenaza de bombarderos soviéticos de largo alcance que pudieran atacar a ambos países. En el actual resurgimiento de Guerra Fría que vivimos tras la invasión de Ucrania, el refuerzo aéreo en la región cobra fuerza creciente. (Julio Maíz Sanz)


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