El acto castrense fue presidido por el jefe de Estado, Nicolas Maduro Moros, y el Alto Mando Militar, incluyendo al ministro de la Defensa, G/J (EB) Vladimir Padrino López, el G/J (EB) Domingo Hernández Lárez, comandante Estratégico Operacional, y los comandantes generales de los cinco componentes de la FANB. La parada militar-policial-popular rindió homenaje a la valentía, disciplina y compromiso histórico de los hombres y mujeres que integran la institución castrense venezolana.
Un total de 14.523 efectivos, 242 vehículos (vehículos, acorazados y motos) y 18 aeronaves participaron en la parada aéreo-terrestre, que incluyó unidades de infantería, fuerzas especiales, Guardia de Honor, Guardia Nacional, Milicia y Policía Nacional. En el cielo, cazas, entrenadores y helicópteros ejecutaron maniobras sincronizadas, reforzando el mensaje de preparación y capacidad operativa.

Durante su discurso, el presidente Nicolás Maduro instó a la FANB a fortalecer los sistemas de defensa aérea y antiaérea, haciendo énfasis en el desarrollo de tecnología propia y la cooperación con aliados internacionales. “Con tecnología propia y con la ayuda de nuestros aliados y amigos del mundo (...) tenemos que seguir fortaleciendo los sistemas de drones y antidrones”, afirmó, destacando los avances en guerra moderna y defensa no convencional.
Pudiendo referirse el mandatario venezolano al tratado de asociación estratégica y cooperación entre Rusia y Venezuela, con el objetivo de reforzar las capacidades de defensa, seguridad y desarrollo tecnológico de ambas naciones firmado en Moscú en mayo pasado y el cual de acuerdo un documento publicado por el Kremlin, establece una cooperación técnico-militar integral, que incluye el intercambio de tecnología, entrenamiento conjunto, asistencia logística y el fortalecimiento de sistemas de defensa aérea, antiaérea y cibernética.

Uno de los aspectos más destacados del desfile fue el despliegue de vehículos blindados como los Fiat Oto Melara 6614 y Norinco VN4, transferidos por la Guardia Nacional a la Policía Nacional, así como los Dragoon 300, Cadillac Gage Commando V100/V150 y BREM-K (3) en sus versiones de transporte, zapadores, morteros y puestos de mando, transferidos por el Ejército a la Guardia Nacional. Estas unidades fueron equipadas con lanzadores de granadas de humo y gas lacrimógeno calibre 38 mm, reforzando su capacidad de respuesta en escenarios urbanos y rurales.
Asimismo, se pudo apreciar el empleo de camionetas pick-up Mitsubishi Triton L200 4x4 militarizadas, y se exhibieron lanchas de ataque fluvial UCOCAR/Boston Whaler Guardián G-25 Piraña recuperadas y que ahora han sido armadas con ametralladoras pesadas CS/LM3 Norinco calibre 12,7x99 mm, lo que refuerza la capacidad de patrullaje y control en ríos y zonas fluviales.





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